Trabajar desde casa se ha vuelto algo de lo más habitual. Dada la situación vivida en 2020, tanto empresas como profesionales están intentando trasladar el grueso de la actividad profesional a los hogares. Es una solución mucho más segura, se gana en rendimiento y comodidades y, además, se evitan problemas de posibles contagios.

Algo posible gracias al continuo avance de la tecnología y el genial funcionamiento tanto de las redes como de los nuevos dispositivos. Gracias a esto y al software del que disponemos, lo tenemos muy fácil para trabajar desde casa. Pero, ¿y para montar nuestra oficina en casa? Ahí las cosas no son tan sencillas, porque solemos dejar atrás algunos factores muy importantes de cara a nuestra productividad y bienestar.

Consejos clave tu oficina de teletrabajo

Para montar una buena oficina en casa, hay algo que se debe tener muy claro desde el primer momento: las cosas se tienen que hacer bien. Piensa en cómo es una oficina normal y en cómo lo facilita todo para trabajar sin problemas, al menos teóricamente. Esa misma fórmula la tienes que trasladar a tu hogar, o más bien a una parte de este.

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Por eso, hay que preparar dinero, hay que tener muy clara la prioridad en un entorno de trabajo y, sobre todo, hay que asumir una mentalidad importantísima: las medias tintas no son buenas. ¿Qué significa esto? Que debes buscar lo mejor a la hora de montar tu espacio de trabajo. Vas a pasar muchas horas ahí, y además de ello dependerá la calidad de lo que hagas.

Busca una habitación exclusivamente para tu zona de trabajo

El mayor error que puedes cometer si trabajas desde casa es pensar que puedes usar cualquier rincón de la vivienda para trabajar. Es un problema tan común como grave, porque a la larga acaba provocando que vincules toda tu casa a la obligación, la responsabilidad y al trabajo. Entonces, ¿dónde quedan la comodidad y la tranquilidad que debe transmitir un hogar?

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Para evitar eso, además de para evitar posturas incómodas, redes Wi-Fi que no llegan bien y un largo etcétera de problemas, lo mejor es buscar una habitación que se vaya a destinar única y exclusivamente a trabajar. Busca que sea una en la que no hagáis mucha vida a diario, que esté alejada de ruidos al máximo posible y que te dé espacio suficiente para instalarte con facilidad.

No escatimes en gastos

Aunque en páginas como la web de ofiprix puedes comprar mucho material a muy buen precio, ten por seguro que no hay que escatimar en gastos a la hora de montar tu rincón de trabajo o tu oficina en casa. Necesitas el mejor equipo, el mejor mobiliario, todo lo que te permita desarrollar tu actividad con total normalidad, como si estuvieras en una oficina de verdad. O mejor aún, que te dé todavía más facilidades que trabajando en la oficina.

Por eso, evita cortarte por precios. Si necesitas una silla mejor, cómprala. Si necesitas un escritorio de calidad, cómpralo. Si tienes que renovar tu PC, no lo dudes y hazlo. Puede que sea un gran gasto al comienzo, pero tanto tu trabajo como tu cuerpo y tu mente lo agradecerán muchísimo a la larga. Además, si no inviertes en ti, ¿en quién lo vas a hacer?

Busca un lugar de trabajo con buena luz natural

La luz natural es vida. Es lo mejor que puedes tener de tu lado a la hora de trabajar porque, para empezar, te ayuda a tener una mejor sensación de tiempo y a controlar tus ritmos circadianos, aunque resulte extraño. Asimismo, evita los problemas que suelen derivar del uso de la luz artificial. Empezando por las jaquecas y las molestias, y terminando por las enormes facturas de luz a fin de mes.

A la hora de reservar una zona de casa para tu espacio de trabajo u oficina, procura que tenga un buen ventanal cerca, o un balcón. Abre de vez en cuando, deja que la luz y el aire entren y te refresquen. Cuando pasas 8 horas delante del ordenador trabajando sin parar, este tipo de cosas hacen que recargues energía y te relajes mucho más de lo que podrías imaginar.

El orden en tu entorno laborar casero es muy importante

Un consejo importantísimo a la hora de montar tu oficina en el hogar es que tienes que ser una persona muy ordenada. No te imaginas la cantidad de tiempo que se suele perder por no tener las cosas donde deberían estar, además de lo incómodo que resulta tener un escritorio desordenado y repleto de cosas.

¿Qué te aporta la organización de tu casa en tu vida personal y laboral?

Ten un buen archivador o pequeñas repisas con compartimentos para guardar las diferentes cosas que puedas necesitar. Establécelo todo alrededor de la zona del PC y de tu asiento, de forma que tengas más cerca lo que más usas y más lejos lo que menos. Esta pequeña jerarquía es una buena forma de empezar a poner orden. Y créenos, es lo que más eficiencia te va a dar a la hora de trabajar.

¿Cómo va la conexión a internet de tu casa?

Tener una buena conexión a internet es una prioridad absoluta. Debes trabajar, para empezar, en una zona de casa donde haya buena cobertura de Wi-Fi o donde puedas conectarte directamente por cable a tu router. Además, debes asegurarte de que la tarifa contratada esté a la altura para ofrecerte un buen ancho de banda y estabilidad en la conexión.

Como puedes ver en esta noticia, es algo esencial para el teletrabajo. Para las reuniones a lo largo del día, para los documentos que se tienen que enviar o recibir. Para todo, necesitas que tu conexión vaya no bien, sino perfectamente. Es uno de los aspectos más importantes que debes tener en cuenta al montar tu oficina doméstica.

Factores clave, algunos bastante lógicos y sencillos, pero determinantes para que puedas tener una buena oficina en la comodidad de tu hogar. Dale un toque personal, establece buenos horarios para tu actividad y el resto llegará solo. Te esperan muchas horas ahí, así que intenta que sea lo más cómodo posible.