Los meses de verano están llegando a su fin y el frío ya empieza a entrar en nuestras casas. La bajada de temperaturas y las primeras lluvias del otoño hacen que empecemos a vestir nuestros hogares para esos días que dentro de poco empezarán a parecer casi invernales. No basta con protegernos con calefactores o radiadores, también hay que conseguir un buen aislamiento térmico que impida que entre el frío y se escape el calor. Gracias a ese aislamiento reduciremos, además, el consumo de electricidad mejorando la eficiencia energética de nuestro hogar.

Las ventanas, un punto débil del hogar

Las ventanas proporcionan luz natural y según su material o composición pueden ser, incluso, parte de la decoración, dando carácter y estilo a nuestra casa. Sin embargo, si no se eligen bien, pueden ser, además, un punto débil de la casa.

Su función es, además, la de aislar térmica y acústicamente el hogar, repercutiendo en el confort y el consumo energético. Las ventanas deben ser una frontera sólida que nos aísle de los ruidos y temperaturas del exterior y en ello influirá el tipo de apertura, acristalamiento y material del cerramiento.

La apertura, una suma de comodidad y funcionalidad

En esta primera parte influyen tanto el espacio, la estancia y su uso. Los tipos más habituales por su funcionalidad son:

  • Corredera: Las hojas se deslizan de forma horizontal. No ocupa espacio adicional al abrirse lo que la convierte en perfecta para zonas limitadas por pilares, esquinas, muebles… Entre sus inconvenientes: el ángulo de apertura está limitado a una hoja y el cierre no es hermético.
  • Abatible: Apertura lateral de la o las hojas de la ventana, por lo que necesitan más espacio disponible para este movimiento, pero ofrecen una apertura total y cierre hermético.
  • Batiente: Apertura inclinada hacia el interior. Asomarse no es posible en este tipo de ventanas de apertura parcial recomendada para baños y garajes.
  • Oscilobatiente: Este sistema es de los más versátiles porque permite una apertura tanto lateral como inclinada hacia el interior. Cuenta con las mismas ventajas que una ventana abatible y, además, proporciona el mejor aislamiento acústico. Estas ventanas son perfectas para dormitorios, salones, cocinas y baños, espacios que necesitan gran ventilación y/o y poco ruido.
  • Pivotante: La hoja de la ventana gira alrededor de un eje central. Se utiliza en buhardillas, tejados…

El mejor acristalamiento para una vivienda más confortable

El acristalamiento puede ser simple o doble, este último es una combinación de dos cristales separados por una cámara de aire deshidratado o gas, y ofrece un aislamiento térmico y acústico mucho mayor. El vidrio siempre tiene un grosos de 4mm, pero la cámara puede oscilar entre los 6 y los 25 mm, a mayor espesor de esta, mayor aislamiento térmico.

En cuanto a los tipos de vidrio distinguimos entre transparente, translúcido, vidrio templado o de seguridad y bajo emisivo, con gran capacidad aislante. El cristal acústico protege del ruido, una opción ideal para dormitorios o viviendas en zonas de mucho tránsito.

Una segunda capa: persianas y contraventanas

Las persianas pueden ser de PVC o aluminio, estas últimas incorporan una capa aislante interna. El material del cajón, donde se aloja la persiana enrollada, y su ubicación también influye a la hora de valorar su capacidad aislante. Los de PVC son los mejores en este aspecto, aunque solo pueden colocarse hacia el interior de la vivienda. El de aluminio es ideal si el cajón está en el lado de fuera, ya que es más resistente a la humedad e inclemencias meteorológicas. El modelo de obra empotrado en la pared es el que menos aísla. Para aumentar esta capacidad sin remplazar la persiana bastaría con instalar una lámina de aislamiento en el interior del cajón, una operación sencilla y asequible que nos ayudará a reducir el consumo energético a la hora de calentar o enfriar nuestra casa.

Persona poniendo un aislante a la persiana para el frío

Las contraventanas son una solución rápida y temporal para mejorar el aislamiento sin cambiar las ventanas. Protegen frente al frío, el calor y el ruido, pero son completamente opacas y no deja pasar la luz del exterior.

El marco, no solo una cuestión estética

Los marcos de las ventanas pueden ser de madera, aluminio, aluminio con ruptura de puente térmico (RTP), que entre la parte interior y exterior incluyen un material aislante para evitar la transmisión de frío y/o calor y, aun así, no llega a conseguir el aislamiento térmico de las ventanas de PVC, que ofrecen una mejor eficiencia energética en el hogar, con un ahorro de hasta el 50% con respecto al aluminio y del 15% con respecto a la madera.

cocina en buhardilla con ventana con persiana

En cuanto al aislamiento acústico madera y PVC lideran el ránking de eficacia, sin embargo, el PVC apenas requiere mantenimiento mientras que la madera necesita cuidados periódicos. El aluminio solo vence en resistencia frente al fuego y posibilidades decorativas ya que se puede hacer en una amplia gama de colores y texturas.

La ventana perfecta

Un modelo de PVC con doble acristalamiento proporciona un ahorro energético de hasta el 50% ya que minimiza las pérdidas de frío y calor entre el interior y el exterior, de apertura oscilobatiente.

LEROY MERLIN destaca, entre su amplio catálogo, la ventana PVC blanca oscilobatiente con persiana, de 100X115 cm. Este modelo, fabricado en España, cuenta con dos hojas oscilobatientes y perfil de PVC, vidrio de acabado transparente, doble acristalamiento con una cámara de 16 mm de espesor y tratamiento bajo emisivo. La suma de estos factores consigue un ahorro del 66% en la factura de la calefacción y/o aire acondicionado.

dormitorio con ventana y persiana blanca de Leroy Merlin

Esta ventana forma parte de las Ecopciones de LEROY MERLIN, dentro de su categoría Confort Sostenible, que engloba aquellos productos de la marca que mejoran el confort térmico y reducen el consumo energético por encima del 60%.

Mejores ventanas, más confort

A la hora de renovar el hogar y mejorar su confort, las ventanas parecen una parte irrelevante y a menudo se les presta poca atención más allá de su acabado. Sin embargo, son un elemento clave a la hora de conseguir una vivienda cómoda, sostenible y que nos ayude a ahorrar. Los expertos de LEROY MERLIN te ayudarán a elegir los materiales idóneos para aislar el interior del frío o calor del exterior, mantener la temperatura agradable de la calefacción o el aire acondicionado y reducir la factura de la luz a final de mes.