El tan conocido “síndrome del impostor” te impide toma acciones, creándote miedos e inseguridades, al mismo tiempo que te tumba al abandono propio. Debido a esto, culminas teniendo culpa, frustración y, por lo tanto, resignación. Como consecuencia de ello, dejas de intentar. Sin embargo, existen diversas formas de eliminarlo.

¿Cómo se desarrolla el síndrome del impostor?

El síndrome del impostor se desarrolla cuando estás en medio de tus objetivos logrados, en un trabajo ideal o determinada situación satisfactoria. Sin embargo, comienzas a cuestionarte si realmente vale la pena que te encuentres pasando por determinada situación.

Cuando cuestionas tu propio potencial para continuar actuando en medio de determinada situación exitosa, es precisamente cuando comienzas a desarrollar el síndrome del impostor. Se trata de ese auto-sabotaje que te impide tomar acciones, y finalmente abandonarlo.

¿Cómo saber si tenemos el síndrome del impostor?

A pesar de que algunas personas puedan ser más propensas que otras al síndrome del impostor, nadie está excepto de ello. Es fundamental entenderlo antes de determinar si creemos tenerlo. Si tienes algunas dudas, lee los síntomas a continuación:

  • Cuestionar tus propias capacidades sin creer que has llegado a determinado punto por esas capacidades que niegas.
  • La necesidad de aislarte o sentirte solo/a y así nadie descubra por lo que estás pasando.
  • Sentir que has llegado hasta donde estás por mera suerte y no por tus propias capacidades.
  • El sacrificio hacia tu bienestar propio para realizar más trabajo y de esta manera evadir tus propios conflictos.
  • Necesidad de perfeccionamiento con la finalidad de realizar aún más trabajo, creyendo que el que ya haces no es suficiente o poco satisfactorio.
  • Creer que alguien en determinado momento podría notar que no eres tan competente como parece, en especial cuando las pruebas de ello no existen.

Una de las más comunes situaciones que presentan quienes llegan a tener el síndrome del impostor es el auto-sabotaje, especialmente al considerar que otros pueden necesitar más ayuda que nosotros mismos, creyendo “no estar tan grave”. Esto ocurre por orgullo, vergüenza, etc. De cualquier forma, es fundamental reconocerlo, nadie más nos ayudará, si nosotros mismos no actuamos para lograr superarlo.

Características del síndrome del impostor

Cuando se comienza a desarrollar el síndrome del impostor, posiblemente resulta invisible ante nosotros; no nos damos cuenta de que es esto lo que ocurre, especialmente por considerar que todo lo que nos cuestionamos es real. Algunas características de que estamos pasando por el síndrome del impostor son las siguientes:

  • Dudar del potencial propio.
  • Incapacidad para evaluar las capacidades propias de forma realista, especialmente la propia competencia y habilidades.
  • Auto-sabotaje ante los propios éxitos de forma inconsciente.
  • Miedo e inseguridad ante el fracaso.
  • Inconformismo ante los miembros del equipo.
  • Agotamiento a causa del exceso de trabajo.
  • Ser perfeccionista.
  • Autoestima muy baja.
  • Poner ante sí una barrera mucho más alta (poco realista) que resulta imposible de alcanzar.
  • La confianza en uno mismo es casi inexistente.

Recomendaciones para eliminar el síndrome del impostor

El primer paso para eliminar el síndrome del impostor es reconocer que existe. Para lograr esto es necesario dedicarle tiempo suficiente. Efectivamente, existen herramientas para lograrlo. Es importante comprender que no logra ser suficiente que sea reconocido por alguien más y te lo haga saber, o que tú mismo te lo repitas cada día muchas veces.

Es importante actuar para lograr eliminar el síndrome del impostor. Si consideras que eres una de esas personas que está pasando por ello, ¿cómo te afecta a ti? ¿te identificas con lo que hasta ahora has leído?

Existen muchas opciones para trabajar en pro de su eliminación, podrás escoger la que consideres sea mejor para ti, bien sea trabajarlo en terapia, con mentorías de profesionales que han pasado antes por tu situación y algunas otras como las siguientes:

  • Contar lo que nos ocurre ayuda a nuestro propio reconocimiento del síndrome del impostor. Las charlas con mentores que hayan pasado por nuestra misma experiencia también nos ayudan a ello.
  • Reconocer al mismo tiempo que validamos la situación, es el principio. Pasar la página, para encontrar escribir otras tantas con mejor actitud.
  • No interiorizar las emociones, sino más bien compartirlas, no solo con personas cercanas, sino con otros que estén pasando por situaciones similares, que estén pasando por el síndrome del impostor.
  • Concéntrate en los hechos reales, en las consecuencias de tal síndrome buscando evidencias.
  • Debes replantear tus pensamientos. El poder de la mente es lo más fuerte del síndrome del impostor, si esa voz interior resulta ser negativa, comienza no solo por monitorearla, sino en modificarla en la medida de lo posible.
  • Los miembros de tu equipo son la mejor escuela, aprende de ellos y sus experiencias.
  • Para reducir los efectos del síndrome del impostor, anticípate a ellos, especialmente cuando ya sabes qué es y cómo se desarrolla.

Si has llegado hasta aquí es porque realmente te interesa vencer el «Síndrome del impostor». Por eso, te comparto este vídeo sobre «La fórmula matemática para acabar con el Síndrome del Impostor» de Ángel María Herrera, que seguro te va a resultar muy interesante. Tómate tu tiempo para verlo y aplica lo que hay en él. Seguro que te ayudará.

Actualizado el 7 de junio de 2023