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Hacía mucho tiempo que teníamos ganas de hablaros de la arquitectura de Alvar Aalto, probablemente uno de los diseñadores nórdicos más influyentes del siglo XX, y uno de los que forman parte del movimiento moderno junto con Le Corbusier, o van der Rohe. Como arquitecto tiene gran preocupación por el hombre y por buscar la relación con éste y el diseño de mobiliario, los interiores y el respeto por el entorno restando las impersonales formas geométricas suavizándolas con nuevos materiales, como por ejemplo la madera tradicional de su país, Finalndia donde nace en 1898 y estudió en la hoy conocida como Universidad Politécnica de Helsinki. Tras participar en la guerra de Independencia de Finlandia recorrió gran parte de Europa.
Durante esta primera época como estudiante, Aalto recibió las influencias del Romanticismo nacional como una expresión del movimiento social frente al avance sueco y ruso en la vida finlandesa de finales del siglo XIX, así en algunas obras del arquitecto se emplean materiales tradicionales como la madera, la piedra y el ladrillo, referencias de la época medieval. Aunque según transcurría el siglo XX los autores finlandeses incluido Aalto diversificaron sus influencias.
Como mucho otros artistas modernos Aalto creyó en la idea de que el diseño se podría aplicar a cualquier objeto cualquiera que sea, desde un edificio hasta una silla, creyendo firmemente que los diseños de muebles eran una extensión de cualquier proyecto arquitectónico , de hecho internacionalmente, Aalto fue reconocido primeramente por sus trabajos en diseño de mobiliario y objetos de vidrio y posteriormente reconocido como arquitecto.
Iniciada la segunda década del XX el Clasicismo aparece con fuerza en los países del norte de Europa. Aalto estudió y escribió sobre el Italia tras visitarla con su esposa. Esta corriente fue la dominante en los últimos años como estudiante del arquitecto y en los primeros como profesional, varias de sus primeras obras revelan la influencia de esta corriente.
Una de sus primeras obras de prestigio es la Biblioteca de Viipuri, dañado durante la primera guerra ruso-finesa y casi completamente destruido en la segunda. El edificio está dividido en dos bloques, uno reservado a salas de reunión y conferencias, y otro a biblioteca, mientras que el techo del salón de conferencias está formado por finos listones de madera que adoptan formas onduladas para resolver la acústica del recinto, donde apenas hay ventanas y la luz proviene de una iluminación central uniforme. El edificio.
En 1925 se casó con Aino Marsio, arquitecta que colaboró en varios de sus proyectos. Los dos juntos viajaron por Europa y durante esa década participó del pensamiento de varias vanguardias y estableció contactos con artistas y críticos. En 1928 fue nombrado miembro del Congreso Internacional de Arquitectura Moderna, más conocido como CIAM, los congresos más importantes de arquitectura moderna, donde tomó contacto influyentes como Mercadal o Le Corbusier.
En 1935 Aalto participa en la Exposición Internacional del Mueble de Londres, la primera de muchas. Dos años más tarde funda junto a su esposa la empresa de mueble Artek, empresa que aún hoy existe, y en la que se exhibe obras de arte del diseño orgánico del siglo XX, una de las facetas por las que es más conocido Aalto, diseños realizados en madera en su mayoría, material idóneo para trabajar en consonancia con la naturaleza.
Para su mujer, Aino Marsio diseñó la primera silla apoyada en una estructura de madera autoportante, que fue patentada y es conocida a día de hoy como la silla Paimio, una silla pensada para que los enfermos pudieran respirar mejor, una pieza de madera que uno de los elementos más característicos de este autor.
El nombre lo recibe de la ciudad de Paimio, donde construyó un sanatorio para enfermos de tuberculosis, que Aalto diseñó incluyendo un edificio para enfermos y otros para profesionales sanitarios, con viviendas dispuestas en hileras se convirtió en un referentes para hospitales con el paso de los años por integrar el paisaje en el edificio y por las formas de las terrazas abiertas que permite la entrada de la luz a las habitaciones.
Aunque Villa Mairea pueda parecer tener menos relevancia social frente a otros proyectos, es muy destacable porque podría representar la obra característica de Aalto. Fue construida para una empresaria de la madera por lo que se puede prever el elemento esencial. El edificio está situado en un bosque de coníferas, la casa tiene una estructura en parte de acero y en parte de ladrillos huecos. Los pilares pueden ser dobles o triples, imitando la forma de los árboles, y la planta principal esta diseñada en forma de L, Y está decorada por la galería del arquitecto, Artek.
La arquitectura de Aalto se preocupa de agregar las variables de cada emplazamiento y cultura con los materiales empleados, buscando una arquitectura no sólo funcional y estética, si no también ergonómica y orgánica. Teniendo en cuenta las particularidades del paisaje y la función social que deberían cumplir sus construcciones así como las necesidades económicas, técnicas y humanas de los que iban a trabajar, a vivir o utilizar cualquiera de sus diseños.
La arquitectura de Alvar Aalto refleja que el uso de formas geométricas básicas revela el racionalismo funcionalista del que partió en sus obras tempranas y que nunca abandonó. Sin embargo, la utilización conjunta de líneas sinuosas tiende a romper la ortogonalidad de la caja arquitectónica, a la vez que acentúa la corporeidad del edificio, para cuya composición no hay fórmulas fijas, pero sin dejar de dar un toque humano y la influencia de la naturaleza.