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Rafael Moneo nació en 1937 en Tudela, Navarra. Afamado arquitecto con multitud de obras repartidas por todo el mundo, su obra es muy variada y siempre guarda relación con el medio donde se encuentra, siendo fruto de una investigación donde se analiza la función, los medios y el pasado para obtener un resultado acorde a las circunstancias concretas.
Obras que perduran en el tiempo a pesar de los cambios, alejadas de los espacios construidos con un fin temporal. Su variedad arquitectónica se debe al estudio de la Historia y el urbanismo: cada obra es inimaginable fuera de su emplazamiento original, entendiendo la arquitectura como un elemento más de la naturaleza, “una actividad necesaria y poco menos que inevitable”, en sus propias palabras
Primeros pasos de Rafael Moneo
Tras su graduación en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid (UPM) en 1961, de la que posteriormente sería profesor adjunto y catedrático de composición. En 1964 viaja a Italia como Pensionado de la Real Academia de España en Roma, allí entrará en contacto con las nuevas corrientes que debaten cómo emplazar obras modernas en contextos históricos, influyendo notablemente en su obra.
Colaborará en varios proyectos con Francisco Javier Sáenz de Oiza o el danés Jorn Utzon en Ámsterdam, conocido por haber realizado el proyecto de la Ópera de Sydney. Allí las corrientes nórdicas también pasarán a formar parte de sus obras, expresadas en un gusto por la sencillez y la simplicidad.
En 1976 comienza su periplo norteamericano invitado por el Instituto de Arquitectura y Estudios Urbanos de Nueva York, y donde permanecerá varios años impartiendo clases en Princeton y Harvard donde será nombrado decano del Departamento de Arquitectura durante cinco años. Allí ahonda en las diferencias entre Arquitectura Moderna y Arquitectura Contemporánea, en la que el espacio donde se ubicará la construcción es definitorio en la primera pero no para la segunda. En la actualidad conserva el título de Doctor honorífico de de la Universidad de Harvard.
En 1996 es el primer arquitecto español condecorado con el premio Pritzker de Arquitectura. A parte de este galardón, considerado el de mayor prestigio en el mundo de la arquitectura, ostenta otros premios: el Premio Príncipe de Asturias (2012), la Medalla de Oro de la Academia de Arquitectura de Francia, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en España o el Premio Nacional de Arquitectura en 2015, entre otros.
Obras de Rafael Moneo
Son muchas las obras del arquitecto navarro que han supuesto un desafío y que han sido reconocidas y aplaudidas por numerosos expertos. La importancia que el dibujo tiene en sus proyectos como primera fase del proyecto constructivo, es un rasgo característico de su obra. Pero como fundamental es lo ecléctico de todos sus proyectos, como crea un collage de influencias que se adaptan de diferentes formas a cada nueva obra y se integran perfectamente en el espacio, sin olvidar su tradición histórica.
Ampliación de la sede central de Bankinter en el Paseo de la Castellana
Esta ampliación se llevó a cabo en el madrileño Paseo de la Castellana en colaboración con Ramón Bescós. EL proyecto arrancó en 1972 y finalizó en 1976. Desde el primer momento marca un antes y un después en el modelo arquitectónico predominante en esta época; la mayoría de las instituciones preferían derribar los edificios históricos donde se encontraban asentadas y crear espacios «actuales». En este caso se decide no derribar el palacio del Marqués de Mudela del siglo XIX, se crea un edifico anexo vinculado al palacio mediante el uso del mismo material que éste, el ladrillo.
Ampliación de la estación de Atocha
En 1982 se lleva a cabo un concurso para la ampliación de la estación de Atocha que gana Rafael Moneo, también siendo elegido para la segunda ampliación en 2007.
En la primera se perseguía ampliar la estación para dar cabida a los trenes de cercanías, crear un aparcamiento y un intercambiador para líneas de autobús. Todo esto se consiguió invirtiendo la entrada de pasajeros y creando un intercambiador circular en ladrillo en la intersección entre la calle Alfonso XII y la Avenida Ciudad de Barcelona, éste serviría para acceder a los andenes de cercanías y como rotonda para facilitar la circulación de los autobuses, coronándolo se pondría un lucernario para la entrada de luz natural. Se ampliaron los andenes para dar cabida a la nueva estación de cercanías y encima de ella se ubicó el nuevo a aparcamiento.
En el caso de la segunda ampliación se pretendía dar mayor espacio a las nuevas líneas de alta velocidad, creando un nuevo espacio diferenciado del anterior por el uso del color blanco. Se puede apreciar mediante el uso de los materiales las diferentes etapas de crecimiento de la estación, que se integra en la ciudad y crece al ritmo de la misma.
La nueva terminal del aeropuerto de San Pablo en Sevila
En este proyecto de 1987, Rafael Moneo combinó la historia arquitectónica de la ciudad de Sevilla expresada en las cúpulas en tonos blancos y azules, sustentadas mediante pilares cubiertos de azulejos de la terminal mezclándolo con la necesidad de un edificio funcional utilizado para el transporte de personas y mercancías, en el que se separan las llegadas y las salidas
También el uso de una abundante vegetación en el aparcamiento es otro reflejo de la tradición de la ciudad, donde nos podemos encontrar naranjos por todas sus calles. En este aparcamiento se intentó abandonar la idea de lugar lúgubre, dándole protagonismo y vistosidad por medio de la vegetación.
Ampliación del Museo del Prado
Finalizada en 2007, fue un proyecto controvertido donde los haya. Debido a la falta de disponibilidad de espacio para llevar a cabo el proyecto se llegó a acuerdo con la Iglesia de los Jerónimos para la venta de su claustro y el terreno en el que se encontraba.
Al concurso se presentaron más de 700 proyectos, del que salió vencedor el de Moneo por unanimidad, al que se llamó «Buen Retiro». La necesidad de más espacio para la exposición de obras, impulsó este proyecto, en el que el claustro de los Jerónimos queda integrado dentro de la estructura en forma de cubo creada por Moneo.
El desnivel desde el edifico Villanueva hasta la ampliación se salva mediante galería subterráneas, la luz llega de forma natural a todo el espacio mediante un lucernario que cubre toda la estructura.
El Museo de Arte Romano de Mérida
Inaugurado en 1986, el conjunto se ideó para dar cabida al Arte Romano de la zona de Mérida y llevar a cabo conferencias, cursos y exposiciones. El proyecto fue concebido desde sus inicios como lugar que albergará los restos arqueológicos encontrados, y que estos formarán parte del proyecto de Moneo.
Un espacio ligado a la herencia romana de Mérida y también a su contemporaneidad, estando muy presente este pasado romano en la construcción, expresada en la misma mediante arcos y puentes, integrando en los métodos de construcción técnicas y materiales de época romana, pero utilizando medios actuales.
Por este proyecto fue reconocido internacionalmente y el Museo fue declarado Patrimonio Cultural por la Unesco en 1993.
Hospital Materno Infantil Gregorio Marañón
Terminado en 2003, el Hospital Materno Infantil de O’Donnell, anexo al Hospital Gregorio Marañón, fue llevado a cabo por Rafael Moneo en colaboración con José María de la Mata. Como hospital, desde un primer momento en el proyecto se buscó la comodidad de los pacientes y la funcionalidad.
El edificio nos habla mediante la elección de sus materiales de su función, vinculada con la tecnología y la medicina: el uso del blanco, el acero, y el cristal, también nos transmiten limpieza. Con este proyecto se decidía acabar con el caótico edifico que antes había albergado la especialidad de obstetricia y cambiar completamente la imagen de la calle, ya que a la par se usa abundante vegetación y se transmite ligereza.
El Kursaal Auditorio y Centro de Convenciones, San Sebastián
Inaugurado en 1999, concebido como auditorio y sede de exposiciones, en la actualidad da cabida al Festival de Cine de San Sebastián.
Situado en el paseo marítimo del playa de la Zurriola, donde anteriormente se ubicaba el Gran Kursaal, edificio polivalente que sirvió desde Balneario hasta casino y fue derribado en 1973, el proyecto se inspiró en la orografía del lugar, siendo su inspiración la desembocadura del río Urumea.
A modo de rocas, los dos cubos de los que se compone el edificio quieren romper con la estética constructiva dominante en esta zona, inspirándose en el paisaje y rindiendo homenaje a las montañas de la zona, el monte Urgull y el monte Uría.
La Torre Puig, Barcelona
Acabada en 2013, la Torre Puig de 109 metros de altura fue diseñada por Rafael Moneo en colaboración con Lucho Marcial y GCA Arquitectos, sirve de sede para la empresa Puig.
El edificio está recubierto de vidrio en dos tonalidades en forma de espiral, dándole mayor eficiencia energética y privacidad. En el interior predomina el blanco y los espacios diáfanos, también estando presente la forma de espiral en las escaleras.
La torre está rodeada de espacios verdes y de un estanque a modo de marco. Se pretendía una unidad entre la arquitectura del edificio y su interior, siendo la ligereza y la simplicidad sus rasgos más característicos.
La ampliación del Ayuntamiento de Murcia
En la Plaza del Cardenal Belluga, donde se asienta el ayuntamiento original, se proyectó la ampliación del del mimo en un solar que quedaba disponible enfrente de la Catedral de Murcia (s. XVIII). En el entorno de la plaza también podemos encontrar viviendas de la burguesía que datan de principios del siglo XX. Por lo que podemos deducir que en este marco se unen el poder civil y religioso.
Con este proyecto Rafael Moneo nos quiere ofrecer una arquitectura que se integra en el espacio pero que da paso a la libertad en la forma, haciendo de este edificio un contrapunto de la fachada de la Catedral, y convirtiendo la arquitectura de la plaza en una evolución histórica del urbanismo.
Rafael Moneo y sus últimos proyectos
El estudio de Rafael Moneo ha llevado a cabo el Museo Universidad de Navarra, finalizado en 2014 y las Bodegas descendientes de J. Palacios en el Bierzo, en 2017. Ambos proyectos vuelven a adaptarse a la perfección a la herencia del lugar y a su futuro uso.
En la actualidad su estudio está llevando a cabo nuevos proyectos como la ampliación del Museo Romano de Mérida o la ampliación de la estación de Atocha.
En 2021 recibirá el León de Oro a la Trayectoria de la Bienal de Arquitectura de Venecia, un reconocimiento a toda su carrera.