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Si quieres darle un cambio a tu cuarto de baño, una de las cosas que tendrás que cambiar es el mueble de baño. En cierta manera se podría decir que es la pieza protagonista del baño. Hay que tener en cuenta que el mueble no solo tiene una función práctica, también decorativa. Por ese motivo, no hay que cometer el error de elegir el primer mueble de baño que nos encontremos, sino que hay que tener en cuenta una serie de pautas que garanticen que la decisión será la acertada.
1- Diseño del mueble de baño
Antes de comenzar la búsqueda del mueble ideal es fundamental elegir qué estilo queremos dar al cuarto de baño. No es lo mismo elegir un mueble para un diseño clásico que para uno moderno.
Lo que está claro es que los cuartos de baño modernos son los grandes triunfadores en los últimos años.
En Asealia podrás encontrar un amplio catálogo de muebles de baño modernos. En ese catálogo no solo te debes fijar en el diseño del mueble para tener la certeza de que es funcional y encaja con el diseño del baño. También es importante fijarse el color para que se pueda integrar correctamente con el resto de la decoración.
Como nos indican los expertos de Asealia, si buscamos un mueble para el uso diario, tenemos que buscar un modelo que cuente con cajones amplios para poder tenerlo bien organizado. Mientras que, si el mueble va dirigido a un baño de invitados, entonces podemos centrarnos más en el diseño. Lo importante es conseguir un buen equilibrio entre funcionalidad y decoración.
2- Medidas del mueble de baño
Otro punto que tenemos que tener muy en cuenta es el espacio que tenemos para colocar el mueble de baño. No solo hay que tener ese dato en cuenta si el baño es pequeño, también si es grande. El objetivo es cubrir el área adecuada para conseguir una decoración bonita. No importa si buscamos un mueble de baño moderno o clásico, las medidas son fundamentales para que la integración sea la adecuada.
Para tener la certeza de que nos va a entrar y el baño no va a quedar sobrecargado hay que medir el ancho, el fondo y la altura. Gracias a que el abanico de opciones es muy amplio, seguro que encontrarás el modelo con las medidas que te interesan. Y si por cualquier motivo no lo encuentras, siempre tienes la opción de encargarlo a medida y así conseguir el mueble perfecto para tus necesidades.
3- Fíjate en el almacenamiento
Para que el mueble se convierta en algo útil para el cuarto de baño, debe contar con un buen almacenamiento y distribución. Debes hacerte a la idea de que es lo que vas a guardar para que pueda tener la distribución adecuada.
Si eres de las personas a las cuales les gusta tener todo bien ordenado en diferentes espacios, entonces opta por los cajones pequeños que te permitirán tener todo guardado en orden.
Si eres de las personas a las cuales les gusta tener todo a mano, entonces busca un mueble con cajones amplios. Todo depende de los gustos y costumbres. Lo importante es que te sientas a gusto con el modelo elegido. Recuerda, el mueble lo vas a usar durante muchos años, no te conformes con lo primero que encuentres.
4- Elige el color ideal
Para que la integración del mueble sea la adecuada, es importante que el color del mueble encaje correctamente con el diseño del baño. Como nos informan desde Asealia, hay muchos fabricantes que fabrican un mismo modelo de mueble en muchos colores. El blanco suele ser el más común, pero también se puede adquirir en otros colores como azul, roble, acacia, negro, gris… todo depende del fabricante.
Para que la integración del mueble sea la adecuada, hay que tener en cuenta el color de la pintura o el azulejo. Teniendo en cuenta ese detalle, es más fácil elegir el color ideal para el mueble. Si quieres que destaque, apuesta por un color fuerte, si quieres que pase un poco más desapercibido, entonces un color claro será una buena decisión.
5- Materiales del mueble
Un mueble de baño es una inversión a medio y largo plazo. Por ese motivo, es importante adquirir un mueble de calidad, aunque eso suponga pagar un poco más de dinero. En la actualidad podemos encontrar muebles fabricados con diferentes materiales, pero los más comunes son:
Aglomerado: es la opción más económica y dentro de este tipo de mueble podemos encontrarnos una gran cantidad de modelos entre los que elegir. La calidad de la madera es media baja, por lo que no es tan resistente al uso y al paso del tiempo como otras opciones.
Muebles de MDF: es la madera de calidad media. Gracias a que se puede trabajar de manera sencilla, este tipo de maderas permiten conseguir muebles realmente bonitos. Además, acepta muy bien las pinturas y las lacas, por lo que los resultados suelen ser siempre muy buenos.
Muebles de madera maciza: es la madera de más calidad y en consecuencia más cara. Si el presupuesto no es un problema, entonces este tipo de mueble puede ser una buena opción. Son muebles muy resistentes y que en muchas ocasiones solo se fabrican bajo pedido.
6- Acabado del mueble
Finalmente debes fijarte en el acabado del mueble. En la actualidad se puede apostar por un acabado de melamina, con lacas y barniz o laminado decorativo. Dependiendo de que sea lo que estás buscando deberás optar por una opción u otra.
