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¿Te gustaría darle otro toque al exterior de tu casa? ¿Una apariencia moderna y urbana? La respuesta es “píntala de negro”. Las últimas tendencias en el diseño de fachadas y exteriores pasa por el negro, un color neutro que dará sensación de amplitud y elegancia.
Esta tendencia vanguardista tiene su origen en algunas ciudades de Estados Unidos. Allí, algunos de los profesionales encargados de dar imagen a las fachadas, apostaron por cubrirlas de color negro. De este modo, se consigue distraer las miradas de nimiedades para centrarlas en el diseño y estructura de las casas. Una estrategia bien acogida que va ganando adeptos cada día. Por eso, cada vez es más normal encontrarnos con una selección de casas negras cuando salimos a pasear.
Si elegimos una casa de diseño moderno para pintar sus exteriores de negro, ésta adquiere una imagen limpia y minimalista. Seguro que no deja indiferente a nadie y todo el que pase por el barrio le dedicará una mirada.
Al igual que en la moda textil, un “look total black” puede resultar demasiado sobrio. En el caso de los hogares podrían adquirir una imagen triste e, incluso, algo tenebrosa, propia de un relato de miedo. Por esto es conveniente romper el bloque negro con detalles en otros colores y texturas. Una buena opción sería añadir unos detalles en color blanco y una puerta llamativa, así el aspecto será más cálido y acogedor.
Esta tendencia que tiene al negro como máximo protagonista no queda reservada a construcciones modernas. Vamos a ver varios ejemplos que demuestran que cualquier estilo es bien recibido en esta propuesta.
Un casa de estilo victoriano localizada en San Francisco y diseñada por Envelope A+D l en el año 2007 podría ser la primera en apostar por el negro. A pesar de que apenas tiene detalles que rompan con el diseño, los detalles de la madera hacen que tenga una imagen acogedora.
Una vivienda sencilla rodeada de una valla de madera. Un diseño común que pasaría desapercibido. En cambio, si combinamos la madera con el color negro y utilizamos este mismo tono para la fachada, nos quedará una vivienda estilosa, con una apariencia envidiable.
Para una casa con una estructura sencilla, se puede combinar el negro y el blanco y añadir una puerta llamativa que desvíe las miradas hacia ella, obviando esos detalles menos visuales. Esta técnica también funciona con casas cuyo diseño no es estético de por sí.
Las viviendas de una planta y de características más tradicionales son perfectas para lucir diseños en negro. Normalmente, estas casas vienen acompañadas de pequeños jardines que añadirán color al conjunto, una combinación perfecta que no dejará indiferente a nadie.
Otra opción, si el negro no termina de convencernos, es apostar por un gris oscuro. La casa sorprenderá igualmente y resaltará entre las de su alrededor.
Si no te atreves a unirte a esta tendencia con tu hogar habitual y cuentas con una vivienda de vacaciones, ésta será perfecta para experimentar con el negro y añadir algunos elementos en colores vivos que aporten alegría, como hacen con esta mesa verde.
Sea el estilo que sea, el negro añade elegancia y da un toque de modernidad a las casas más rústicas. Además, esta tendencia crea estampas realmente bonitas en la nieve, ¿quién dijo que el negro era el color de la tristeza? Cuéntanos, ¿apostarías por el negro para el exterior de tu casa?