Chema Madoz, fotografiando ilusiones

Chema Madoz es uno de los fotógrafos españoles actuales más reconocido y respetado a nivel internacional. El fotógrafo madrileño, junto con su obra, considerada por muchos una gran obra de arte, han conseguido hacerse un hueco en las esferas fotográficas que van más allá de las fronteras de su país de origen.

Por lo general, las imágenes de Chema Madoz son pequeñas construcciones o montajes para los que emplea y manipula sencillos objetos presentes en la vida cotidiana. El blanco y negro domina sus fotografías en las que la imaginación y la creatividad se abren hueco para crear imágenes que rozan el  ilusionismo y atraen las miradas de todo aquél que se topa con alguna de sus creaciones. Su fiel compañera, una cámara de medio formato Hasselblad que le acompaña desde hace 10 años es parte implicada de sus brillantes resultados.

Pero el camino hasta alcanzar la reputación de la que goza en la actualidad es largo, comenzando en el año 1980 con sus estudios de Historia del Arte en la Universidad Complutense de Madrid y, al mismo tiempo, sus estudios de fotografía en el Centro de Enseñanza de la Imagen.

Pronto la Real Sociedad Fotográfica de Madrid expuso las obras de Chema Madoz. Esta exposición, junto con la realizada por la Sala Minerva del Círculo de Bellas Artes de Madrid en 1988, fueron las primeras y abrieron las puertas del resto de exposiciones que ha realizado a lo largo de su carrera, y que sigue realizando en la actualidad. A partir de 1990 decide dedicarse únicamente a la fotografía de objetos, pues hasta el momento las personas también habían formado parte de sus retratos, lo que le irá proporcionando fama y se hará con múltiples seguidores.

Su primera experiencia fuera de España fue en el año 1991 de la mano del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y de la exposición Cuatro direcciones: fotografía contemporánea española, de la que forman parte algunas de sus obras y que viajó por varios países. En ese mismo año su trabajo se ve recompensando al recibir el Premio Kodak.

Son muchos los logros de los que se está colmando su carrera. Entre ellos se encuentra la publicación de algunos libros donde se recoge su obra en distintos períodos de su carrera, como la monografía de 1995 llamada Chema Madoz (1985-1995) o Mixtos-Chema Madoz. Otra de sus grandes medallas es haberse convertido en el fotógrafo español en vida al que el Museo Reina Sofía le dedica una retrospectiva con la exposición Objetos 1990-1999.

Sin duda, el año 2000 no puede ser olvidado al hablar de este poeta visual, así es como le nombran el diversas ocasiones, pues varios acontecimientos de importancia tuvieron lugar en esa fecha. En este año Chema Madoz se alza con el Premio Nacional de Fotografía de España, es reconocido como Autor Destacado por la Bienal de Houston Fotofest y recibe el premio Higashikawa en Japón.

Entre fotografías, exposiciones y reconocimientos transcurre la vida de Chema Madoz, amante de la fotografía con luz natural en blanco y negro. Mientras tanto, nosotros seguiremos asombrándonos y dejándonos llevar con sus imágenes que le buscan otra cara a la realidad.