El Círculo de Bellas Artes acoge una exposición sobre Elmyr de Hory que nos invita a reflexionar sobre lo que consideramos arte y la valoración del plagio. Elmyr de Hory: Proyecto Fake es la primera gran retrospectiva que se hace de el artista húngaro, para muchos el mayor falsificador de arte.
Hory (1906-1976) llegó a pintar y vender más de mil falsificaciones. Sus falsificaciones se expusieron en museos de todas partes del mundo pero bajo la firma de reconocidos artistas como Picasso o Modigliani. Hizo que a los expertos les fuera imposible diferenciar entre una obra original y una de sus falsificaciones. El director de Fogg Museum de Harvard en 1955 le compró un dibujo de Matisse llamado A Lady with Flowers and Pomegranates, dibujo que en realidad estaba hecho por él.
El primer cuadro falso que vendió fue en París en 1946. Lady Campbell le visitó en el estudio. Allí la multimillonaria amiga de Hory vio un dibujo que pensó que era de Picasso y se lo pagó como si se tratara de una obra del pintor malagueño.
Elmyr de Hory: Proyecto Fake reúne óleos y acuarelas, además de dibujos y litogrfaías. La muestra cuenta con 28 obras del artista al estilo de Monet, Degas, Picasso, Modigliani, Léger, Van Dongen, Sognac, Derain, Vlaminck, Matisse, Renoir y Dufy, y 6 retratos pintados a su propia manera.
También se puede ver el documental de Ana Useros, Historias como cuerpos, cristales como cielos. En él se aborda el concepto de autoría tanto en la vida como en el arte.
La exposición, además de acercarnos a la figura de Elmyr de Hory, también nos hace reflexionar sobre la autoría, sobre lo que es el arte, su relación con el negocio y cuál es su esencia.
Nació en Budapest, Hungría, y vivió durante 16 años en Ibiza, donde se suicidó poco después de conocer que iba a ser extraditado para ser juzgado por falsificación. Él siempre se declaró inocente.
Elmyr de Hory usaba distintos nombres en su trabajo como Dory Boutin, L. E. Raynal y Louis Nassau.
La exposición se puede visitar en el Círculo de Bellas Artes hasta el 12 de mayo. Además, en abril celebrará un congreso homónimo que ayudará a entender mejor al Elmyr de Hory y todas las cuestiones que nos llegan de su trabajo.
