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Con centenares de proyectos a sus espaldas, proyección internacional y un estilo propio muy codiciado, Lázaro Rosa-Violán es uno de los nombres más conocidos del interiorismo español actual.
Se define a sí mismo como “arqueólogo urbano” y “cazador de estilos”, y gusta de recorrer el mundo buscando inspiraciones y nuevas fronteras que traspasar. Lázaro nació en Tánger, Marruecos, de padres catalanes, pero se crió entre Bilbao, Madrid y Barcelona y actualmente reside entre la Ciudad Condal y Nueva York. Siempre estuvo muy interesado en el arte (con solo ocho años asistía como oyente a clases en la Academia de Bellas Artes) y se formó en esta carrera como pintor, aunque no tardó en descubrir su talento para el diseño de interiores.
«Pintor por formación, viajante por convicción y diseñador de interiores por instinto», dice de sí mismo en su página web: capaz de encontrar inspiración en todas partes, con un amplio conocimiento de las artes que integra en sus proyectos y trabajador infatigable. Afirma dormir solo tres horas al día, y habida cuenta de lo prolífico de su trabajo, que además crece exponencialmente, nos los creemos.
Su primer proyecto como interiorista lo realizó en Ibiza en 1990, y en 2002 creó su propio estudio, Contemporain Studio, que no ha dejado de recibir atención mediática y elogios de los entendidos tras realizar múltiples proyectos para hoteles, restaurantes y retail por todo el mundo y para clientes cada vez más importantes.
Entre sus trabajos podemos contar los hoteles de la cadena Pulitzer de Barcelona, Roma y Buenos Aires, los restaurantes de la cadena de comida española Ibérica en Londres, el Hotel madrileño Only You, los restaurantes Punk Bach, Martinete o Bazaar en la capital o Boca Grande y Chez Cocó en Barcelona, el multiespacio de ocio gastronómico Platea de Madrid, el Hotel Market de Barcelona, o los proyectos del chef David Muñoz: DiverXO, del que ya os habíamos hablado, y StreetXO, en Londres.
Además, Lázaro Rosa-Violán se ha encargado del interiorismo de algunas tiendas de firmas tan importantes como Oysho, Pull&Bear o Lefties del gigante Inditex; o de las nuevas tiendas de Pronovias y Aristocrazy en Barcelona. Además, la casa en el Ensanche que comparte con su pareja y director de marketing Devin Winter, así como su estudio, fueron escenario de un reportaje fotográfico de Mario Testino para Vogue US. Con Testino, por cierto, está colaborando en el museo MATE de Lima, dedicado al fotógrafo.
Su estilo podría definirse como neoclásico, aunque Lázaro asegura que su método de trabajo pasa siempre por escuchar al cliente y adaptarse a su estilo, por lo que entre sus proyectos encontramos un gran eclecticismo de espacios y tendencias.
Apostó por algo que no fuese el minimalismo cuando la austeridad de este estilo lo ocupaba todo, diseñando interiores lujosos en los que confluían lo vintage y lo industrial, lo barroco y lo audaz. En sus interiores, espacios grandiosos y modernos, armonizan elementos con tanta personalidad como piezas de anticuarios, reliquias art-decó o columnas y puertas de antiguos palacios; con materiales de derribo o baldosas hidráulicas.
Todos los entendidos del interiorismo están atentos al trabajo de Lázaro Rosa-Violán, y los clientes se disputan poder contar con su talento y estilo para diferenciar sus espacios de cualquier otro. No cabe duda de que la carrera meteórica de este interiorista todavía tiene mucho futuro por delante.
