La ciudad de Estados Unidos concentra el mayor número de casinos del país, con edificios inmensos en donde jugar a todo tipo de juegos, desde las tragaperras al póker, al tiempo que se disfruta de otras opciones de ocio y se contempla la majestuosidad de cada complejo.

Hablar de casinos es hablar de Las Vegas. La meca del juego está en Las Vegas, en Estados Unidos. Todo jugador, especialmente si hablamos de profesionales, debe disputarse unas cartas, por ejemplo, en alguno de los casinos de Las Vegas.

Aunque, bien es cierto, que, en los últimos tiempos, el enclave de Macao ha ganado cierta visibilidad como centro neurálgico de los juegos de azar en la zona asiática del planeta. Si no podemos ir, siempre nos quedará la opción de juegos gratis en el móvil. Pero soñar no cuesta nada.

Pese a todo Las Vegas siguen marcando el ritmo, aunque el primer casino no se creó en esta ciudad de los Estados Unidos.

Los libros de historia indican que las primeras noticias sobre un casino se ubican en Venecia. El casino Ridotto abrió sus puertas en 1638, siendo el primer casino regulado por una legislación. Se trataba de un casino de titularidad pública y que fue abierto coincidiendo con la celebración de los tradicionales carnavales de la ciudad italiana.

Seguramente, los asistentes a ese lujoso edificio fueron los habitantes venecianos de la clase alta de la ciudad. El casino de Ridotto estuvo abierto hasta 1774, fecha en la que fue clausurado alegándose que no convenía tener un casino abierto en Venecia. Temas de reputación, pues Venecia sigue siendo centro importante del juego, aunque no tanto como Las Vegas.

Seguramente, bien a través de una película o de alguna serie, todos hayamos visto cómo son Las Vegas, y sus casinos, sus hoteles y todo aquello que convierte a la ciudad de Nevada en un sitio muy recomendable para visitar, contemplar toda su dimensión y echarse unas partidas al póker, unas monedas a la tragaperras o jugarse todo a nuestro número favorito, o color, en alguna de las múltiples ruletas instaladas en sus centros de juego.

Así es la vida en Las Vegas. Aunque hay numerosos casinos, a lo largo de las siguientes líneas, haremos un repaso a aquellos casinos que han sido mejor valorados, incluyendo no sólo las opciones de jugar a los juegos de azar en sus instalaciones, sino en todo lo que rodea al casino: su construcción arquitectónica, el resto de las instalaciones del complejo y sus llamativas decoraciones.

Casinos de lujo en Las Vegas

Este listado de casinos más considerados por crítica y público comienza con uno inspirado en la Roma de los césares. Nos referimos al Caesars Palace. Este complejo cuenta con dos casinos, aunque hay mucho más entre partida y partida.

Hay un total de 14 restaurantes con todo tipo de gastronomías del mundo y espacios para otros ocios como discotecas, tiendas, salones para eventos, spa o gimnasios. Asimismo, este complejo también por un hotel de cerca de 4.000 habitaciones y haber sido escenario de grandes conciertos y rodajes de míticas películas cinematográficas.

La oferta de juego y ocio se repite en otro casino de referencia. El Palazzo. Es el segundo casino-hotel más alto de Las Vegas y su casino ocupa casi 10.000 metros cuadrados en una de las avenidas más populares de la ciudad. En su interior, aquellos amantes del azar disponen de más de 2.000 máquinas y 80 mesas de juegos. Y sí, para relajarse, además de poder pernoctar, hay spa, gimnasios, restaurantes y un sinfín de opciones con las que conjugar casino y turismo.

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The Mirage es otro complejo mítico en Las Vegas. Igualmente que a los anteriores, éste también cuenta con un inmenso casino, y, por supuesto con las instalaciones habituales de estos inmensos sitios.

Acudir al casino de The Mirage conlleva otro añadido en comparación a los anteriores. Se trata de hacer un descanso en el casino para subirse a su montaña rusa, con ese afamado giro de 180 grados incluido en su diseño. De vértigo. Como los artistas más afamados que acuden a cantar a su auditorio.

Si dentro del amplio catálogo de juegos, nuestro deseo es disfrutar de las tragaperras, el complejo Redrock es nuestro sitio. En su interior, hay más de 2.700 máquinas tragaperras, que son el faro de un sinfín de mesas en donde probar suerte a cualquier juego de cartas o con la ruleta. La suerte está echada, siempre y cuando no acabemos deslumbrados por los más de tres millones de diminutos cristales de Swarosvky que sirven de decoración en su interior. De lujo.

Un guiño a Venecia

Más lujo encontramos en el MGM Grand Hotel y Casino, que tiene el honor de ser el hotel más grande de todo Estados Unidos, con casi 7.000 habitaciones. No sólo eso es un récord. Su casino cuenta con casi 16.000 metros cuadrados, siendo el más grande de Las Vegas.

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En su casino, además de jugar o recordar alguna escena de alguna película filmada en su interior, podemos ver incluso algún animal de carne y hueso paseando por sus instalaciones, convenientemente sujetos. Con esas amplitudes, en el interior del casino, hay un espacio dedicado a las nuevas generaciones, con todo tipo de apuestas y con espacio para los eSports.

En Las Vegas también hay un guiño a la historia de los casinos. The Venetian es otro de los más populares y está inspirado en la ciudad de Venecia, es decir, donde se creó el primer casino oficial y regulado del mundo. Aparte de sentirte como en la ciudad veneciana y navegar entre canales, hay opción a jugar al casino.

Otro de interés para el jugador y el turista, como pueden ser otros casinos de la ciudad, como el Luxor Hotel Casino (con un aroma egipcio en su construcción), The Cosmopolitan of Las Vegas, Mandalay Bay Resort y Casino (su casino ocupa una superficie de 13.000 metros cuadrados); Aria Resort y Casino (un casino con luz natural, con lo cual sí se sabe si es de día o de noche), entre otras muchas opciones de juego que nos ofrece Las Vegas, la meca del juego y de los casinos.