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Las lámparas, además de ser imprescindibles para iluminar, son un accesorio perfecto para resaltar o completar la decoración de una casa. Existen modelos muy reconocidos de lámparas que a día de hoy siguen teniendo presencia en muchas casas, de manera consciente o sin saber de su fama. Sin embargo, siempre son bienvenidos los diseños originales, sostenibles y con propósito.
Lámparas conscientes con el medio ambiente
Lámparas de hilo reciclado
Inga-Wera-Jane Heymann es la diseñadora al frente de WeraJane Design, marca que fabrica estas lámparas que, con tan solo mirarlas te pueden transportar a Ibiza por su aire bohemio o incluso a Marruecos por sus colores vivos pero a la vez muy combinables. Los diseños geométricos, que como explica en su página web “se asemejan a los jarrones angulares y antiguos”, elevan la decoración de cualquier estancia, y si además son sostenibles, es un plus. La estructura se fabrica en una fábrica de metal local y Jane las termina en su taller de Leipzig (Alemania) a mano con hilo, compuesto nylon y algodón en la misma proporción y al que da una segunda vida al ser reciclado.
Lámparas con energía eólica
La iluminación (led) de estas elegantes y a la vez sofisticadas lámparas de pie está proporcionada por una energía renovable: el viento, lo que supone un paso más en la búsqueda del aprovechamiento consciente de los recursos naturales. Forman parte del proyecto Colors of the Windway de GwaGwa, presentadas en el festival Smart Illumination y ganadoras del primer galardón.
Lámparas procedentes del plástico
En los últimos años se ha empezado a concienciar de los perjuicios que causa las ingentes cantidades de plástico que se producen en el día a día, y por ello, muchas empresas buscan alternativas para reducir o eliminar este material en sus productos. En este caso, el estudio Ximo Roca Diseño y la firma Plussmi (ambos españoles), con su lámpara Lamuda, contribuyen al reciclaje del plástico, creando un diseño fabricado a base de botellas de plástico que además es fonoabsorbente, es decir, capta parte del sonido ambiente. Es una lámpara en suspensión cuyo diseño es elegante y minimalista, perfecto para cualquier espacio.
Diseños originales
Lámpara en forma de nube
Para todos los amantes de la lluvia y las tormentas, la lámpara The Cloud diseñada por Richard Clarkson, es un sueño hecho realidad. Además de su forma (ya original de por sí), tiene en su interior varios leds de colores que, según el modo que se seleccione, podrá iluminarse imitando a los truenos y relámpagos propios de una tormenta.
Una lámpara, tres posiciones
Con la lámpara en suspensión Méduse Light podrás tener una lámpara a la que puedes cambiar su diseño, además de regular la intensidad de luz que aporta. Creada por Lukas Bazle, puedes cambiar la forma manualmente gracias a que se pliega tirando de un cordel, y de momento se puede adquirir en blanco, negro, azul y verdemarino.
Una nueva forma de encender la luz
El estudio de diseño y arquitectura Ed Heritage ha diseñado esta lámpara que, tan solo con inclinarla, se enciende. La lámpara Tilt innova en la forma en que tenemos de interactuar con estos objetos, haciendo que lleguemos a disfrutar de la experiencia de encenderla, además de tener un diseño cuidado, minimalista y original.
Una lámpara que se desplaza sola
Lo común es que en un inmueble se tengan luces distribuidas a lo largo de la casa, pero eso obliga a encender y apagarlas bastantes veces. Pero con una lámpara como la que ha diseñado Kazuhiro Yamanaka, podrías disponer de una luz que te siga a donde necesites, sin necesidad de utilizar nada para transportarla. Esto es posible gracias a que la «Flying dron lamp» tiene un sensor que permite captar el movimiento y de esta forma pueda seguir al usuario a donde él vaya.
Una lámpara con la forma de Luna
Esta lámpara es perfecta para crear un ambiente de relajación, pero también es muy funcional gracias a que se puede modificar la dirección de la luz. Constantin Bolimond ha diseñado esta lámpara de manera que los que serían los cráteres de la Luna son los agujeros por los que sale la luz, y se puede tapar y destapar al gusto de cada uno.
Lámpara con tecnología dim to warm
Ihana es la lámpara creada por la arquitecta de interiores Joanna Laajisto para la empresa Marset. La diseñadora quiso que el diseño de estas lámparas se adaptara a cualquier estancia y fuera elegante, fino y atemporal. Incluye un innovador sistema de iluminación, formado por varios difusores de vidrio soplado opal que permite incluir hasta 14 difusores conectados a un solo punto de luz. Su tecnología dim to warm permite regular tanto la intensidad de la luz como su color, desde blanco cálido (3000K) a ultra cálido (1800K).
Artesanía pura
Lámpara con formas de la naturaleza
Estas lámparas, fabricadas por Andreea Braescu capturan la atención de todo el mundo por su diseño cuidado al detalle y brillante. Cada lámpara está compuesta por hasta 1000 pétalos de porcelana, lo que la hace de ella una valiosa pieza artesanal.
Lámparas de cristal de murano
Este material es uno de los más cotizados para hacer objetos de decoración; con él se han hecho vasos, jarrones, y ahora lámparas, de la mano de Magic Circus Éditions en colaboración con la casa Venini, referente en la manufactura del cristal de murano. Tener una lámpara Balloon es tener una joya como decoración, ya que su diseño es alegre, original y tiene un gran valor al estar hecho a mano.
Con un propósito especial
SALt Lamp (Sustainable Alternative Lighting)
Aisa Mijeno, en colaboración con su hermano Raphael, tenía el convencimiento de que era posible conseguir electricidad de una forma alternativa a las fuentes habituales. Su investigación le permitió crear una lámpara que proporciona hasta ocho horas de luz con solo un vaso de agua y dos cucharadas de sal. La razón principal que impulsó a esta científica a desarrollar esta lámpara fue poder dotar de luz a aquellos que más lo necesitaban, y su convencimiento es tal, que no se comercializa, sino que únicamente se distribuye entre la población filipina.
Una lámpara solar para todos
El artista danés Olafur Eliasson y el ingeniero Frederik Ottesen quisieron que comunidades más desfavorecidas pudieran tener acceso a la electricidad de una forma que fuera menos costosa para ellos, y es por ello que crearon las lámparas Little Sun. Se trata de lámparas que se cargan con la luz del sol y proporcionan entre cinco y diez horas de luz, necesitando cuatro para cargarse y haciendo que la luz sea accesible para todos, cómoda de utilizar y con un diseño que combina la forma de una flor y el sol.