No hay que echar la vista demasiado atrás para dar con una época en la que eran residuales las apuestas deportivas que se hacían. Básicamente esto era fruto de existir solo las casas de apuestas físicas. Es decir, había que desplazarse para apostar a favor de un equipo u otro.

La situación cambió por completo cuando surgieron las primeras casas de apuestas deportivas online. Sin embargo, por aquel entonces todavía eran numerosos los usuarios que se mostraban reticentes a hacerlo por Internet, ya que no terminaban de fiarse del todo de los métodos de pago y de cobro que existían.

El surgimiento de PayPal, Neteller, Bizum y otros sistemas similares se tradujo en que las apuestas deportivas proliferasen hasta límites insospechados. Tanto es así que, en la actualidad, hay algunas personas que basan su estilo de vida en ellas.

¿Cómo lo hacen? De varias maneras, aunque una de las más populares consiste en hacer predicciones de futbol. Es decir, sus conocimientos del considerado como deporte rey en España son aplicados para analizar estadísticas e incluso partidos en tiempo real, tratando así de realizar pronósticos que sean acertados.

Si el porcentaje de aciertos es elevado, estas predicciones tanto de fútbol como de cualquier otro deporte pueden venderse en grupos de Telegram, por ejemplo, aunque hay muchas otras plataformas en las que es posible ejercer de tipster.

Dedicarse profesionalmente a las apuestas deportivas, ya sea vendiendo pronósticos o simplemente apostando uno mismo para tratar de obtener beneficios, no es la única manera de convertir este hobby en un estilo de vida. El simple hecho de ver solo aquel deporte en el que se apuesta también es otra forma de hacerlo.

Sea cual sea el método por el que opten los usuarios, hay que decir que adoptar las apuestas deportivas como forma de vida trae consigo una serie de contras que no conviene obviar. Por supuesto, también tiene pros, los cuales describiremos a continuación.

Aspectos positivos que llaman mucho la atención

El primer pro es uno de los más atractivos. Nos referimos a la posibilidad de ganar dinero con algo que gusta mucho a millones de personas en todo el mundo: ver deporte. Eso sí, no es tan fácil como simplemente disfrutar de los eventos deportivos, ya que detrás hay un proceso analítico que ha de ser llevado a cabo de manera adecuada si se quieren obtener buenos resultados, evitando así las pérdidas.

Otro pro que también merece ser mencionado guarda relación con la mejoría que experimentan los usuarios en lo referente a los cálculos. Estar constantemente tratando con cuotas da pie a que, al cabo de un tiempo, las multiplicaciones se lleven a cabo en un tiempo récord sin necesidad de calculadora.

Independientemente de si las apuestas pasan a ser el estilo de vida de una persona a nivel profesional o de manera amateur, en los dos casos se obtiene otra ventaja de la que no disfrutan quienes no apuestan. Hablamos de lo emocionantes que pasan a ser los eventos deportivos.

En líneas generales, la emoción a flor de piel solo se experimenta con los partidos de aquellos equipos o deportistas que uno sigue. Por ejemplo, los forofos del Villarreal CF se lo pasan en grande con los encuentros que disputa el equipo ‘groguet’, pero un partido jugado por el Getafe simplemente lo ven por puro entretenimiento. Todo cambia si hay dinero en juego.

Es indescriptible la emoción que sienten las personas que basan su estilo de vida en las apuestas cuando, un gol a favor o en contra, así como un saque de esquina o cualquier otra acción, puede suponer que ganen dinero.

Factores negativos que hay que tener en cuenta

Ahora que acabamos de mencionar el hecho de obtener beneficios, no hay que olvidarse de que también puede suceder todo lo contrario. De hecho, en la mayoría de casos lo que pasa es que el usuario acaba con pérdidas.

Otro contra a valorar se resume en que, tanto las ganancias como las pérdidas, no dependen de uno mismo. De hecho, una simple lesión o una decisión arbitral equivocada puede dar pie a que se produzca un cambio radical en el resultado de un encuentro, afectando de lleno a la apuesta que había sido llevada a cabo.

En caso de que acabe habiendo pérdidas, algunos usuarios hacen todo lo posible con tal de recuperarlas. Es entonces cuando aumentan al máximo las probabilidades de acabar teniendo problemas con las apuestas. Nos referimos a la imposibilidad de gestionar adecuadamente el stake.

Asumiendo estos contras y sabiendo parar a tiempo si es necesario, es posible lidiar con el resto de aspectos negativos, dando pie a que la experiencia de apostar no traiga consigo nada malo. Aun así, si crees que estás teniendo problemas para controlarte a la hora de apostar, lo mejor es solicitar la autoprohibición del juego para evitar males mayores.