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El frío, las heladas y la nieve se convierten en los grandes desafíos de la temporada invernal para el hogar. Para hacerles frente es fundamental contar con los materiales adecuados de mantenimiento y protección.
Aísla bien cada rincón
El primer paso es contar con ventanas de una buena calidad. Para poder mejorar su
capacidad aislante, se debe prestar atención a las persianas y ventanas.
- Burletes: es una de las soluciones más sencillas, rápidas y económicas para aislar ventanas e incluso puertas sin realizar obras. Se trata de bandas de silicona, caucho o espuma ideales como aislantes de filtración de agua y de aire por cualquier rendija que pueda haber.
- Cristales de las ventanas: el vidrio es el factor que más condiciona el aislamiento de una ventana. Instalando fácilmente un film transparente, se simula el sistema de doble acristalamiento.
- Sellar los marcos de las ventanas y grietas: para las posibles grietas o mejorar el sellado de los marcos de las ventanas, se recomienda aplicar espuma de poliuretano. Garantizan una correcta impermeabilización y disminuyen la pérdida de calor en el interior de la vivienda.
- Si es necesario cambiar las ventanas del hogar, opta por opciones como las ventanas PVC. Ofrecen un ahorro económico gracias a su aislamiento térmico eficiente, contribuyendo a mantener la temperatura interior constante y reduciendo la pérdida de calor.
Protección anti-congelamiento
Cuando el frío se instala, el agua presente en diversas superficies al aire libre tiende a
congelarse, lo que puede ocasionar daños estructurales en el hogar.
La aplicación de productos anticongelantes es esencial para prevenir la formación de hielo
en áreas exteriores y reducir los riesgos asociados al clima invernal.
Los sacos de sal son una solución sencilla para evitar la formación de hielo en áreas exteriores como accesos, patios y caminos, ayudando a impedir que se forme hielo y facilitando la descongelación de superficies ya congeladas.
Protege las tuberías
Proteger las tuberías durante los períodos de heladas y bajas temperaturas es esencial
para prevenir daños costosos y problemas asociados con la congelación del agua en el
interior de las tuberías. Para aumentar la protección, es útil añadir una capa adicional de
aislamiento.
- Aislamiento para tuberías: sus materiales aislantes, diseñados para envolver las tuberías expuestas y proporcionar una capa adicional de protección contra el frío con una instalación muy sencilla.
Mantén la calidez en el interior de la casa
Desde sistemas de calefacción eficientes hasta soluciones de aislamiento térmico, existen
productos que no solo garantizan un ambiente cálido y confortable, sino que también
contribuyen a la eficiencia energética y al ahorro en costes de calefacción.
- Radiadores eficientes: brindan calor de manera efectiva y eficiente. Existen en diferentes tamaños y estilos para adaptarse a las necesidades de cada hogar.
- Aprovechar el calor: los paneles reflectantes se instalan fácilmente detrás de los radiadores y son muy útiles para aprovechar al máximo el calor que producen.
- Calefacción por suelo radiante: esta solución innovadora proporciona un calor uniforme en el hogar desde el suelo hacia arriba, brindando una sensación de confort térmico ideal en la vivienda.
Ten en cuenta los techos y cubiertas
La acumulación de lluvia, nieve y hielo en los techos puede causar daños significativos, lo
que podría conllevar problemas de humedad y pérdida de aislamiento térmico en el hogar.
Entre otras cosas, es importante asegurarse que los canalones pluviales estén limpios para evitar concentraciones de agua y detectar posibles filtraciones de agua en muros y soleras.
Mantener los techos y cubiertas en buenas condiciones es esencial para prevenir la acumulación de agua o nieve, daños estructurales y problemas de humedad.
- Pintura impermeabilizante: estas pinturas forman una capa protectora sobre los techos y cubiertas actuando como una barrera eficaz contra la filtración de agua, protegiendo las superficies y evitando la formación de hielo en ellas.
- Selladores y masillas para techos: estos productos sellan grietas y fisuras, evitando la entrada de agua y asegurando la integridad estructural.