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Cuando tenemos un negocio propio, nuestro producto o servicio es, sin duda, lo que nos diferencia. Pero si queremos darlo aún un empaque mayor, no hay nada como personalizar aquellos elementos que vayamos a entregar a nuestros clientes.
Por supuesto, las tarjetas de visita con un diseño propio son algo fundamental que nuestros clientes tendrán presente de forma física, aunque hoy no puede faltar una página web en la que muestre nuestros servicios o aquello que comercializamos. No se trata de que sea especialmente compleja, pero sí debemos tener la información primordial de lo que hacemos y nos permitirá introducir su dirección tanto en las tarjetas como en el resto de soportes físicos que necesitemos.
Bolsas de papel y cajas de cartón personalizadas
Sobre todo en el caso de que nuestra actividad sea la venta de productos, necesitaremos entregarlos, en casi todos los casos, en bolsas y/o en cajas. Y si queremos que éstas tengan un aspecto más profesional, transmitiendo también esa imagen de nuestro negocio, será ideal que éstas sean personalizadas, desde el material y el grosor del mismo, hasta los colores y, por supuesto, la impresión de nuestra imagen de marca, logotipo o información propia del negocio en las mismas.
En el caso de las bolsas de papel, podemos elegir desde el Kraft liso (disponible en diferentes colores: blanco, verde, negro, rojo, azul, fucsia o amarillo entre otros) o celulosa, desde un grosor que va desde los 90 gramos por metro cuadrado a los 120. También puedes optar por dos tipos de asas, lisa o rizada y elegir diferentes tamaños que se adapten a lo que ofreces.
Lo que sí que nos parece también muy importante, es que las bolsas que elijamos sean reciclables y respetuosas con el medio ambiente, a la par que 100% biodegradables y con posibilidad de ser reutilizadas.
En cuanto al packaging, ocurre lo mismo en cuanto a formas de transportar nuestros productos, tenemos la posibilidad de personalizar incluso más si cabe que con las bolsas, ya que los tamaños se adaptan al 100%. Esto es especialmente importante, por ejemplo, para aquellos objetos que deben ir muy ajustados en su continente por su fragilidad (elementos de cristal como botellas, frascos…).
En este caso, a pesar de que hay medidas estándar, los proveedores de este tipo de elementos tienen la capacidad de crear exactamente las que necesitemos, incluso nos podrán asesorar sobre el mejor formato para transportar o contener nuestro producto en particular.
Por otro lado, debemos tener en cuenta de que no siempre tenemos que imprimir en las propias cajas nuestra imagen, sino que podemos identificarlas también con cinta adhesiva. En ese caso, la estética industrial de este sistema nos hará quizás más económica y versátil a la hora de imprimir la estética de nuestro negocio a cualquier tipo de caja neutra.
Si la necesidad de cajas son para otro tipo de fin que no es el de negocio, también un proveedor te las puede hacer a medida, por ejemplo, para una mudanza de gran envergadura. Podrás encargar exactamente las cajas de la medida que necesites para los objetos que quieres mover o quizás almacenar durante más tiempo en un trastero.
