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Situado en el área de Hamsptead, una de las más cool de la capital británica, Ginger&White es un negocio familiar que fue destacado por The Guardian como uno de los lugares en los que disfrutar de buena comida por menos de 10 libras.
Ubicado en una zona céntrica de Londres, en la que como viene siendo habitual los precios se disparan, Ginger&White se ha diferenciado por tres cosas: la primera, que sus precios son más asequibles y razonables; la segunda, que pese a su situación céntrica es relativamente desconocido para los turistas, por lo que no hay excesivas aglomeraciones de gente; y la tercera, que son decididamente family-friendly, es decir, que son muy tolerantes con la presencia de (ruidosos) niños pequeños.
Este negocio lo regentan el matrimonio de Emma y Nick y Tonia, la tercera socia, todos ellos con hijos (de ahí su concienciación con proporcionar un espacio a las familias con niños). El local original abrió en 2009 y se encontraba en Perrin’s Court, pero el éxito que tenía era tal que en 2011 tuvieron que buscar uno nuevo que fuera más amplio y les permitiera hacer frente a la demanda, esta vez en England’s Lane.
Ampliaron el horario de vinos, consiguieron una licencia para servir alcohol e incorporaron una cuidada carta de vinos y a día de hoy siguen llenando el local hasta el punto de que se forman colas por las mañanas cuando los residentes locales acuden en masa a por su dosis matutina de café.
Consta de dos pisos, el inferior dotado de grandes mesas comunales donde suelen acomodarse esas familias a las que Ginger&White se dirige y en la que podemos esperar ver a niños correteando, y el superior (el área de mezzanine), más tranquilo y con mesas individuales, elegantes alfombras y cómodos sofás; además de las mesitas situadas en la calle bajo su toldo marrón.
La decoración tiene el encanto minimalista de los cafés europeos: mucha madera de aire rústico, muebles restaurados y reciclados (por ejemplo, cajas de madera que hacen las veces de mesa) paredes blancas para hacer más luminoso el espacio, y pequeños detalles decorativos que refuerzan su carácter decididamente ingles, como Union Jacks en tonos sepia de aires vintage en las paredes y estampadas en los cojines.
Quienes lo han probado destacan sobre todo la calidad de su café, elaborado con granos tostados a mano por Square Mile Coffee Roasters, así como de su repostería casera, elaborada en una pastelería hermanada en Belsize Park, quizá el punto más fuerte de Ginger&White: cupcakes de todos los colores, tartas caseras entre las que destaca su esponjosa carrot cake (de donde surge el nombre del local), y otros postres típicamente ingleses como el banana bread o los hot buns.
Además ofrecen una serie de platos ligeros como ensaladas y otros (no tan ligeros) que definen como «greasy spoon classics» elaborados con productos de mercado y con recetas actualizadas, como tostadas con habas (que a los españoles puede sonarnos a chifladura, pero es un snack muy popular en Reino Unido), los llamados butties (bollitos untados de mantequilla) con bacon, huevos, frittata de queso y salchicha, sándwiches, bagels…
Su lema es «We don’t do Grande!», refiriéndose no solo a los típicos cafés de las grandes cadenas sino también a su modo de trabajo, garantizando la atención personalizada proporcionada por un equipo pequeño y unido, con productos frescos y de calidad. Este negocio familiar es un favorito de los vecinos de la zona y promete ser una parada encantadora para todos los que tengan la oportunidad de visitar Londres y quieran disfrutar del ambiente cozy de este negocio familiar marcadamente inglés y con una fuerte apuesta por la comida casera y los productos y recetas locales.
Nombre: Ginger&White
Web: Ginger&White
Lugar: 4a-5a Perrins Court, NW3 1QS Londres
Metro: Hampstead
Horario: De Lunes a Viernes de 07:30 a 17:30. Sábado y Domingo de 08:30 a 17:30.
Wifi: Sí
Qué ofrecen: repostería casera y café de excelente calidad elaborados con productos locales y apostando por las recetas y el espíritu más británico
