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Cuando hablamos de la decoración vintage, hablamos de un estilo muy definido que nos muestra, entre otras cosas, objetos que fueron creados en otras épocas. Por lo general, estos objetos cuentan con diseños propios de mediado del siglo XX, así como de décadas sucesivas, sin pasar, eso sí, de los años 90.
Sí, en la decoración vintage es importante incluir estos objetos, pero, además, es esencial tomar una serie de decisiones para crear ambiente; y es que la decoración no solo son muebles, también son paletas de color, paredes y suelos.
Claves para lograr la decoración vintage ideal en tu salón
Las claves para poder crear un conjunto vintage en el salón pasan por una elección correcta en los muebles, pero también en el pavimento y en las paletas de color.
Elige una década concreta
Aunque no hay problema en mezclar objetos de diferentes décadas, lo cierto es que el hilo argumental de un espacio puede verse alterado si metemos demasiada variedad.
El estilo vintage es amplio y se refiere a varias épocas que se unen en una única tendencia. Por tanto, sería interesante elegir entre diferentes estilos, desde los años 30 hasta los años 60 o incluso 80. Escoge bien la época porque las piezas y los colores cambiarán muchísimo de una a otra.
¿Hay una década favorita? Lo cierto es que la decoración de los años 60 sigue siendo una de las más buscadas. Colores llamativos en textiles y líneas muy marcadas en muebles de maderas oscuras.
Escoge una paleta de color adecuada
La paleta de colores en paredes o incluso en muebles grandes como el sofá es importante. Esta paleta de colores estará muy relacionada con la década que hemos escogido.
Si bien es cierto que muchas de esas décadas pueden verse animadas por estampados llamativos en paredes, como los papeles pintados sesenteros, hay que pensar que sobrecargar una estancia nunca es la opción.
Si buscas una pared de contraste, puedes escoger una y colocar ese papel pintado. Ahora bien, la recomendación general es dejar el resto de las paredes en un tono más bien neutro. ¿Por qué? Porque de esa forma aligeraremos el conjunto y, al mismo tiempo, daremos prioridad visual a esas piezas decorativas que son el grueso de nuestra decoración.
¿Debes elegir el blanco de forma obligada? No, ni mucho menos. Hay un sinfín de tonalidades neutras como el beige, el color magnolia o incluso un color gris claro.
Conoce los pavimentos vintage
Si hay un suelo que siempre va a encajar en un estilo vintage es, sin duda, la madera. No, no es necesario que optemos por madera natural si no queremos, pues sabemos que cuenta con un mantenimiento que no todos queremos hacer. Hay alternativas que van desde los suelos laminados, suelos vinílicos o incluso porcelánicos que imitan esta madera.
Podemos, además, usar azulejos que nos recuerdan a otras épocas, como los ya famosos azulejos hidráulicos, con mosaicos y cenefas muy llamativas. Es más, existe la posibilidad de mezclar ambos materiales para dar como resultado un suelo con mucho sabor a otra época.
Juega con la propia arquitectura de tu casa
Cuando hacemos una reforma, muchas veces nos encontramos con verdaderos tesoros que se pueden aprovechar para una decoración vintage. Nos referimos a vigas de madera antiguas, a paredes de ladrillo bien conservadas o incluso pilares y columnas de madera en las casas más viejas.
Todos estos elementos arquitectónicos van a hacer de nuestra casa un lugar con muchísima personalidad.
Obtén piezas vintage
Si nos metemos de lleno en la decoración a través de los muebles, podemos decir que se recomienda el reciclaje. Sí, seguro que hay muchos muebles en tu casa que pueden tener una segunda vida y que pueden convertirse en esa pieza original que necesita tu salón.
Además, también es esencial buscar nuevas piezas que sigan esta tendencia vintage.
Adquiere un aparador vintage
Una de las piezas clave de todo salón es el aparador. En este caso, los aparadores vintage serán uno de esos muebles imprescindibles.
Son, además, muebles muy prácticos, pues en sus cajones podemos guardar desde la cubertería del salón hasta la mantelería.
Consigue sofás y sillas con historia
Si optamos por comprar un sofá y unas sillas con aire vintage, tendremos que ir a modelos y diseños de otras épocas. En el caso del sofá, no hay duda de que uno de los modelos que más nos llevan a otra época es el precioso sofá tipo chester.
En el caso de las sillas, son muchas las que podemos encontrar, como la silla Tolix, que era un clásico en los bistrós parisinos, o la silla Cesca, ese modelo con rejilla en respaldo que fue creado por Marcel Breuer en 1928.
Añade una librería antigua
Un salón no es un salón acogedor si no contamos con libros y otros elementos decorativos. Para ellos, una balda puede servir, pero un salón vintage se sentirá mucho mejor si lo llenamos con una gran librería antigua. Una librería de madera, por ejemplo, que pueda acoger nuestros libros y otros objetos como vajilla antigua o incluso láminas vintage que no queramos colocar en las paredes.
Esperamos que te haya resultado útil nuestras recomendaciones para decorar tu salón de estilo vintage.
Imagen portada: DepositPhotos