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Lorenzo Castillo es uno de los más reconocidos decoradores españoles. A lo largo de su carrera profesional ha sabido congeniar a la perfección los elementos más clásicos del diseño de interiores con las antigüedades.
Licenciado en Historia del Arte por la Universidad Complutense de Madrid, curso estudios de Arte y Antigüedades en la Escuela de Anticuarios de la capital. Aunque no solo ha dedicado su profesión al mundo del Interiorismo, también se le conoce por sus trabajos de joyería y textiles.
Una carrera extensa y polifacética avalan al diseñador. Desde que en la década de los 90 abrió su primera tienda de antigüedades no ha dejado de trabajar. Empezaba su carrera con un concepto rompedor que dejaba atrás todo lo establecido hasta el momento. Viajaba y compraba todo tipo de mobiliario y decoración, una manera de internacionalizar su producto y ofrecer a sus clientes piezas novedosas de diseñadores de medio mundo. Algo que nadie hacia aún. Esta pasión no solo se centró en la venta de antigüedades, sino que se extrapolo al diseño de interiores, de manera casi automática todos necesitaban que él organizase, decorase y distribuyese su casa.
Creador de piezas y espacios únicos, ha desarrollado proyectos para altas firmas como Loewe para quien diseño las tiendas de la Gran Vía madrileña, uno de sus primeros grandes trabajos que le abrió las puertas a los mayores proyectos de interiorismo. Luego llegaron las tiendas de Loewe en Shangai y Hong-Kong.
Entre sus trabajos más significativos de decoración y mobiliario en nuestro país está la del Museo del Traje y la remodelación de los hoteles de la cadena Room Mate de Madrid, Málaga y Granada (que actualmente se encuentra redecorando).
Se le encargo la decoración del Paseo del Prado y las plazas de Cibeles y Neptuno para la boda del Príncipe de Asturias. Miles de particulares llaman a su puerta hoy para desarrollar numerosos proyectos en sus viviendas, sobretodo en Francia, EEUU y España.
Este éxito se debe a los toques neoclásicos de sus obras, sin abandonar la sencillez. Su trabajo llama la atención precisamente por su gusto y delicadeza, todo ello hace que su estilo no pase desapercibido.
Entre sus virtudes, la de encontrar armonía en las distintas corrientes clásicas (barroca, gótica, etc.). Huye de aquello que es estridente y recargado con gran acierto, algo impropio de aquellos que trabajan con antigüedades a quienes el Maximalismo y lo cargado llama especialmente la atención. Una armonía y equilibrio que consigue gracias a la sobriedad de sus decorados. En todo ello encontramos su seña de identidad.
Los dorados, la madera noble, las lámparas de araña, los muebles tapizados, grandes espejos, maxialfombras, gruesas cortinas, seda, espejos monumentales caracterizan las escenas más clásicas y la firma de Lorenzo Castillo.
El diseñador se caracteriza por una concepción del diseño y la decoración con referencias al mundo de los anticuarios. Su casa, su santuario, su lugar de trabajo, un palacete del siglo XIX ubicado en pleno centro de la capital madrileña, una auténtica joya que tras años de trabajo, remodelaciones y diseño de mobiliario se convierte en su vivienda.
Si el interiorismo va mucho más allá de la reestructuración interna de una vivienda, Lorenzo Castillo pone esto en manifiesto es su increíble casa. Un palacio ubicado en el corazón del barrio en Lavapiés de Madrid.
Dos años de intensas obras y siete después de la compra del inmueble, cuya función original era la de un convento, antes de que el Conde Torrijos estableciera su palacio allí. Casi 1.000 metros que en los últimos años albergaban un almacén de disfraces se han convertido en un inmenso apartamento en el que el interiorista también trabaja.
Aunque se vio obligado a mantener los espacios originales ha conseguido dotarlos de una personalidad propia. Más allá de las amplias zonas interiores, destaca en ella un jardín interior con cúpula, un pulmón verde dentro de una vivienda céntrica, todo un lujo de valor incalculable.
Una escalera de mármol de Macael con barandilla de hierro y molduras en distintos tonos decora la subida hacia una planta que impresiona por la amplitud de sus espacios. La osadía y el buen gusto se reflejan en ese mestizaje entre piezas y estilos de otras épocas, todo enmarcado en un ambiente acogedor de uno de los barrios más populares e históricos de la ciudad: Lavapiés.
La parte privada de este gran apartamento, es un dúplex de 80 metros con una magnífica escalera de caracol que se sitúa en uno de los laterales del patio. La cocina en tono verde agua se caracteriza también por esa mezcla de estilos que tanto se da en este hogar. Un viejo retrato del rey Alfonso XIII preside uno de los muebles y falsas taxidermias de los años 60 en forma de cabeza de toro ocupan con majestuosidad una de las paredes.
Su dormitorio, bajo la misma linea vestido en papel de Sanderson y decorado con cuadros de época y actuales, se basa en tonos rojos y la estética Op-art, uno de los referentes de Lorenzo.
Como el mejor ejemplo de su trabajo la ha convertido en un ‘surround’ de alto nivel y es que todo, desde adornos, lámparas, decoración y mobiliario, está a la venta, aunque solo para unos pocos clientes afortunados.
Como hemos dicho, su trabajo se caracteriza por una visión polifacética del diseño. Su gran conocimiento sobre la historia del arte y la decoración le ha llevado a crear una colección de textiles para la marca Gastón y Daniela que atrae por su delicadeza. Terciopelo, indianas y formas geométricas. Las texturas y una paleta de colores novedosos crean textiles con un sello propio.
Lorenzo Castillo, uno de los referentes equilibristas entre el mundo clásico y lo antiguo, uno de los referentes interioristas en casi todo el mundo. Una mirada intima y clásica. Un Anticuario de corazón e interiorista de vocación. Un hombre que nos descubre el diseño más castizo visto desde una óptica moderna y funcional. Sencilla por su elegancia.
Libro sobre el diseñador: «Lorenzo Castillo» de Lorenzo Castillo y Enric Pastor
Este libro del mismo nombre del autor es una obra de arte producida por un brillante diseñador. Su gusto es reconocido como ecléctico, fresco con un ligero toque clásico. Para muchos, este artista mezcla de manera apasionada tanto lo clásico como lo actual con el toque particular de cada individuo.
Este famoso diseñador de interiores es ampliamente reconocido en muchas ciudades no solo a decorado las habitaciones y salas de estar de personalidades, también ha diseñado y decorado para innumerables tiendas, restaurantes, hoteles, casas. Su amplia experiencia lo llevo a rehabilitar un palacete antiguo del siglo XVII en Madrid de donde el reside.
En este libro el artista se enfoca en nueve proyectos realizados. Explicando de manera exquisita el buen hacer al momento de diseñar interiores.
Talentos de Lorenzo Castillo
Definir a Lorenzo Castillo sin darle un sinfín de loas es muy difícil. La razón muy sencilla este decorador español ha logrado compaginar tanto lo clásico del diseño de interiores con las antigüedades.
Lorenzo Castillo es un profesional Licenciado en Arte que también hizo estudios como anticuario en la capital española. Su gran talento lo ha llevado a explorar otras áreas donde ha sabido explotar sus virtudes como es la joyería y el textil.
Ha creado espacios de una exquisitez asombrosa para altas marcas como Lowe. Su talento ha trascendido fronteras, llegando a trabajar y desarrollar espacio para personalidades y celebridades en EEUU, Francia y España.
Su estilo es reconocible por su sencillez, delicadeza y es justamente por esto que su capacidad de armonizar lo barroco con lo neoclásico, o lo gótico con otras tendencias tomando siempre en cuenta las particulares que le puede imprimir cada persona.
Es por esto que Lorenzo es considerado una artística de enormes virtudes. Su historia como anticuario y su corazón de interiorista hacen la mezcla perfecta para darle exclusividad a todo espacio que este personaje da imprimiendo su talento y su alma.
Actualización 13 noviembre 2020
