En su día ya os hablamos de la maravillosa y colorida decoración mexicana, pero si hablamos de la trayectoria arquitectónica de México, no podemos dejar de hacerlo de Mario Pani Darqui.
Este arquitecto, con formación europea, ha realizado grandes obras en la ciudad de México, que hoy se alzan como símbolos de la misma. Gran parte de la construcción de esta ciudad y de su planificación urbanística se debe al trabajo de Mario Pani Darqui, una de las figuras mexicanas contemporáneas más conocidas y valoradas en la actualidad, destacando su productividad y originalidad.
Mario Pani Darqui nació en la ciudad de México en 1911. Desde su infancia tuvo contacto con profesiones técnicas como la arquitectura, siendo su tío Alberto J. Pani, uno de los arquitectos más conocidos de la época post revolucionaria de su país. Así como con la ingeniería, debido a su padre, quién ocupó el cargo de cónsul en diferentes países de Europa, razón por la que Pani Darqui se formó fuera de México.
Así, completó sus estudios primarios en Italia y continuó los secundarios en París. Tras esta etapa entró en la Escuela Nacional de Bellas Artes de París para comenzar sus estudios de arquitectura. Una vez había obtenido el título, lo revalidó en la Universidad Nacional Autónoma de México y se instaló de nuevo en su ciudad natal, donde desarrolló su trayectoria profesional.
Si bien sus primeros trabajos fueron obras de poca o mediana envergadura, lo cierto es que pronto comenzó a hacerse un hueco entre los grandes de su época, asumiendo proyectos de mayor importancia. Sus trabajos iniciales se vieron marcados por la aplicaciones estricta de los conceptos teóricos de la arquitectura. Sin embargo, poco a poco, la creatividad, la novedad, la utilización de materiales diferentes y las aplicaciones artísticas más visuales se abrieron paso en sus creaciones. Algo que fue bien recibido por su país.
En sus proyectos, destaca la funcionalidad y las ideas de Le Corbusier. Además, sus propuestas siempre se adaptaron a las necesidades del momento. Y supo combinar sus conocimientos europeos con las propuestas de su país, obteniendo de este modo lo mejor de ambas enseñanzas.
Sin duda, una de las cosas que más ha marcado su trayectoria ha sido su preocupación por los problemas sociales. De este modo, se adelantó al crecimiento de la población. Siendo un visionario de la problemática que esto podría causar en referencia a la vivienda, guió sus infraestructuras hacia edificios verticales para albergar en poco espacio horizontal un gran número de familias. Seguramente esta sea una de sus grandes propuestas que ha sido llevada a cabo a lo largo de todo el mundo.
El nombre de Mario Pani Darqui resuena en todo los rincones de su país como el creador de la estructura y planificación urbanística de la ciudad de México. Muchos de las edificaciones simbólicas de esta ciudad llevan su sello. Por otro lado, fue pionero en el diseño de infraestructuras como viviendas multifamiliares y condominios de lujo. A la vez, participó en los grandes planes urbanísticos de su país como Ciudad Satélite, el Hotel Plaza o el Condominio del Paseo de la Reforma.
No hay que olvidar que, además de sus construcciones, Pani Darqui fundó, en 1946, el Colegio de Arquitectos de México del que fue profesor. Dos años más tarde creó la revista Arquitectos que se mantuvo durante más de cuarenta años en activo con publicaciones sobre arquitectos de renombre y sobre las tendencias e influencias del momento. Ese mismo año, junto con el arquitecto Jose Luis Cuevas, abrió un taller de urbanismo en el que trabajaron en proyectos de gran importancia.
Su trayectoria profesional ocupa unos cincuenta años. En ellos ha llevado a cabo 136 proyectos, tanto arquitectónicos como de planificación urbanística, de diversas temáticas como escuelas, viviendas, hoteles, hospitales, aeropuertos, etc. Podríamos destacar la Torre Insignia, el Condominio de Acero o la Torre de la Rectoría de la UNAM.
Un trabajo reconocido públicamente al recibir el Gran Premio de la Academia Nacional de Arquitectura en 1984 y el Premio Nacional de las Artes en 1986.
