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En el hogar o negocio las puertas serán en muchas ocasiones la primera impresión que tendrá quien nos visita. La elección de estas traerá consigo un abanico muy amplio de opciones y de dudas. Somos conscientes de que cada hogar y negocio tiene unas necesidades y características, es por ello que será imprescindible saber los pros y contras de cada opción. A continuación vamos a explicaros dos tipos de puertas: batientes y correderas.
Qué son las puertas batientes
Este tipo de puerta hará las funciones de una puerta tradicional, es decir, abrirse hacia fuera o dentro, pero contando con un motor. Este motor será clave, ya que será el encargado de llevar a cabo la acción de apertura, evitando así cualquier esfuerzo por parte de las personas, y pudiendo realizar esta acción a través de un mando a distancia. Os dejamos un ejemplo de motores de puerta en Avidsen.
El tipo de motorización que se usa es telescópica la cual sirve tanto para portal calado o semi-calado. Es muy útil a la hora de adaptarse a la puerta, ya que puede usarse en todo tipo de puertas, tanto de madera, acero, PVC o aluminio.
No olvidamos la seguridad, tanto activa como pasiva. De manera activa, el motor detiene la puerta ante un obstáculo e inicia la vuelta hacia atrás, evitando accidentes. De manera pasiva, tendremos cubierta la seguridad hacia nuestro hogar o negocio, ya que protege ante la tentativa de apertura.
Este tipo de puertas y motores son muy típicos en entradas o garajes. Son puertas que se utilizan mucho a diario y cuanto mayores sean las facilidades con las que cuente la puerta, menor será el esfuerzo por parte de las personas para abrir o cerrar la misma.
Qué son las puertas correderas
Las puertas correderas son aquellas que veremos abrirse de manera horizontal, es decir se deslizan a través de un sistema inferior de cremalleras. Esta opción aprovecha los espacios al máximo, ya que no necesita un espacio para que la puerta se abra por completo como en el caso anterior. La acción se realiza de forma paralela al lugar donde se encuentra. En el ejemplo que os hemos dado también encontraréis motores para hacer vuestras puertas correderas. En este caso tendremos en cuenta sobre todo el tamaño de la puerta y el peso de la misma.
Existen motores para puertas de hasta 4 metros y con un peso máximo de 200 kg. Si tu puerta es más grande puedes optar por el motor que soporta puertas de hasta 8 metros y de hasta 500 kg.
Este tipo de motor también cuenta con la opción de parar ante obstáculos, evitando cualquier tipo de accidente, así como de proteger ante la posibilidad de robos.
Ambas puertas con sus respectivos motores pueden montarse fácilmente siguiendo las instrucciones, de manera muy sencilla e intuitiva, sin necesidad de técnicos.
De esta forma os enseñamos la mejor opción para vuestro hogar o negocio, para que la podáis aprovechar al máximo. Es una decisión importante, pero teniendo la información adecuada será mucho más sencillo elegir la que mejor se adapte a cada necesidad.