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Con la llegada del otoño nos hemos propuesto crear ambientes acogedores, lugares donde cualquiera pasaría largos días de lluviosos. Os hemos hablado en muchas ocasiones de cómo podéis conseguir espacios mas acogedores y hoy os traemos un estilo que bien recuerda a la serie americana «La casa de la pradera» el French Country.
La esencia de esta tendencia es que al entrar en un lugar nos recuerde a una casa de campo, por ello vamos a usar elementos decorativos con cierta influencia campestre.
Los colores que más se llevan en este estilo son los amarillos o anaranjados, de la misma manera que grises y marrones. Tonos más claros, como rosas o azules también tienen una presencia destacada y para conseguir esa sensación de estar en medio de la naturaleza nos haremos con las tonalidades que más nos recuerden a ella, los verdes brillantes y oscuros o azul cobalto son geniales para ciertos elementos de la casa. En este caso el negro gana protagonismo en piezas decorativas.
En cuanto a mobiliario, destacaremos el estilo rústico con detalles de hierro forjado y madera con aspecto desgastado. Ideales para esta tendencia. Los accesorios más comunes también se trabajan en hierro forjado, los candelabros y lámparas de araña son elementos casi indispensables.
Para completar este estilo, podemos optar por decorar las paredes con relojes de gran tamaño y las ventanas con cortinas de algodón o telas más pesadas. Las fundas de almohada pintadas a mano también son perfectas para rematar este estilo que tanto se ve en las actuales casas de campo.
No hay mueble más francés que una chaise longue, ni nada más funcional. Además de ser un elemento que se adapta a cualquier espacio, recibidores, dormitorios, salones e incluso a exteriores, terrazas e invernaderos. La versión renovada de este estilo mantiene las patas torneadas, el barnizado y la forma curvilínea, pero sustituye los brocados por tapicerías lisas en tonos neutros. El toque más antiguo puede reflejarse en cojines de terciopelo o seda y mantas de lana.
El estilo French Country tiende a una esencia «british» que se representa en bancos con respaldo. Las butacas de madera potente en tonos más oscuros y sobre todo en los tapizados de flores que decoran desde paredes a cortinas, pasando por mantelerías y muebles estarcidos.
Si deseas un ambiente cálido prueba la decoración French Country una tendencia que se define por el uso de materiales naturales, entre ellos maderas, piedra estaño, algodón y lino, así como colores tierra y combinaciones de estampados de flores, rayas o cuadros.