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Situado en el barrio más hipster de la capital, el restaurante Ojalá recrea el ambiente más surfero de la costa en pleno centro de ciudad.
Este auténtico chiringuito madrileño se ha convertido en un oasis de relajación, estilo y gastronomía en la ciudad. Es una de las cinco aventuras hosteleras del grupo La Musa (otras tres, La Musa, La Musa Latina y Cafetería HD se encuentran también en el centro de Madrid), que el año pasado fue renovado y actualizado y que cada vez consigue enamorar a más gente con su apuesta chill out.
El espacio, diseñado por Andrés Jaque (premiado con el León de Plata en la Bienal de Arquitectura de Venecia) es definido por éste como «el porche de una casa construida en la misma arena de una playa». Tiene dos plantas, una superior que cuenta con una terraza interior, de estética shabby chic; y la planta baja, que está literalmente cubierta de arena idéntica a la de las playas de Almería. Incluso los baños son un ejemplo de creatividad: han sido diseñados como un homenaje al disco Smile de los Beach Boys.
La decoración de la planta superior es en tonos aguamarina con toques de color naranja y flúor, muy propios del beach style, que consiguen insuflar un poquito de mar y de sol a cualquier interior.
El contrapunto a estos tonos tan frescos y veraniegos lo aporta la madera natural de la barra-mesa (de gran tamaño, al estilo de las mesas comunales que triunfan en los restaurantes europeos), las mesas de terrazo y las sillas de hierro rescatadas del Rastro. Podemos encontrar también un jardín suspendido formado por macetas-lámpara que cuelgan del techo y un invernadero hecho de varillas de paraguas, que convierte, este espacio en una auténtica terraza interior.
En la planta baja, una tonelada de arena blanca cubre el suelo, donde podemos tumbarnos en sofás bajos de respaldos reclinados y coloridos cojines, en un ambiente de luz tenue con los chispazos de color que aportan los fluorescentes de las paredes y una barra de bar que imita a la perfección a un chiringuito de madera.
Los uniformes del personal, que combinan pajaritas, deportivas y delantales de rayas a colores, corren a cargo de la diseñadora Ángeles Hidalgo, mientras que la nueva imagen gráfica es obra de Jorge López Conde. El responsable del diseño de la carta es el director artístico Simone Nicotra, que además ha diseñado y tallado cada una de las tablas-bandeja en las que se sirven los platos. A cargo del chef Javier Brichetto, la oferta gastronómica se caracteriza por ser creativa, internacional y apta para cualquier momento del día.
Apuestan, por ejemplo, por un concepto poco conocido en España: los all-day breakfast, es decir, comida de desayuno disponible hasta las 20:00. Sus brunch de inspiración americana ofrecen una gran variedad de huevos (benedictinos, florentinos, parisinos, rancheros…), tostadas y repostería artesanal. Una gran parte del menú tiene como ingrediente clave el pan, de masa madre y fermentación lenta, y del que podemos encontrar variedades tan originales como el de chocolate con naranja o el pan inglés de soja.
Bocadillos, wraps, sandwiches, hamburguesas, tacos… con recetas de todo el mundo, como los bocadillos con salsa vietnamita, los tacos mexicanos de presa pibil o la ensalada sapori. También hay tablas para compartir de humus, embutidos o guacamole; en una carta que Brichetto define como informal, «que se puede comer con las manos».
Y en cuanto a los postres, ofrecen opciones tan suculentas como las torrijas de brioche, una revisión de la piña colada o la incombustible tarta de queso. Todo esto se completa con una oferta de bebidas en la que encontramos tés fríos y calientes, zumos, batidos, sangrías y cócteles de creación original. Lo mejor: los precios son más que razonables, con menús de 11 euros, brunchs por 7 y platos que podemos encontrar desde 2 euros.
Con una estética tan conseguida y original y una oferta gastronómica asequible, no es de extrañar que el restaurante Ojalá cuente cada día con más adeptos que buscan ese pedacito de playa y el relax de los chiringuitos de verano en medio del barrio más castizo de Madrid. Si quieres disfrutar de un refrescante cóctel o de, por ejemplo, un gazpacho de sandía, no dudes en dejarte caer por este espacio tan cool que convertirá cualquiera de tus días en unas mini-vacaciones.
Nombre: Restaurante Ojalá
Sitio Web: La Musa -Ojalá
Lugar: Calle San Andrés 1, 28004 Madrid
Metro: Tribunal, Noviciado
Horario: De Lunes a Miércoles de 09:00 a 01:00. Jueves de 09:00 a 01:30. Viernes de 09:00 a 02:00. Sábados de 11:00 a 02:00. Domingos de 11:00 a 01:00. La playa abre desde las 18:00 y permanece abierta hasta el cierre del restaurante.
Qué ofrecen: Comida internacional, creativa y desenfadada, en un ambiente surfero que recrea la playa y los chiringuitos de la costa
