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A la hora de planificar un viaje, la elección del hotel en el que hospedarse es importante. Pero en ocasiones, puede ser el lugar al que se viaja, como ocurre con el Hotel Amangiri, situado en Canyon Point de Utah, en Estados Unidos. Este resort, integrante de la cadena de hoteles Aman, atrae a todo huésped que quiera alojarse durante uno o varios días en la meseta de Colorado, rodeado del paisaje natural característico del salvaje oeste.
El hotel ofrece distintas opciones de alojamiento, todas ellas con una arquitectura y decoración digna de admirar. Para el diseño del resort, tuvieron como máxima la conexión de sus clientes con el espacio que les rodea. Por ello, todas las habitaciones (34 en total) están decoradas con el fin de que se perciban como un elemento más de la naturaleza del entorno. Esto lo consiguen utilizando para su estructura materiales como la piedra blanca o el cemento en color arena.
Amangiri consta de un edificio central del que nacen dos alas: el «Ala Mesa», con dieciocho suites y el Aman Spa, y el «Ala del Desierto» con dieciséis suites y vistas al desierto. En este se concentran el restaurante con terraza y la piscina común, que se fusiona con el entorno.
Todas las suites se componen de una decoración en tonos tierra, monocromáticos y en la que existe una mezcla de materiales. Las paredes revelan el propio material de la estructura del hotel, que se complementa con cristaleras plegables de madera y las cortinas. Las sillas y tumbonas presentes en las suites también están fabricadas en este material, con líneas rectas que se complementan a la perfección con cojines en color crema. Algunas de ellas cuentan con el respaldo y asiento de rafia y otras de madera. En cuanto a los sillones, así como la estructura de la cama, están hechos también de cemento y fundidos en la estructura del edificio, proporcionando continuidad a las paredes y el suelo.
El hotel oferta la Suite Girijaala y la Suite Amangiri como sus dos estancias estrella. Ambas cuentan con una piscina y terraza privada, lo que las hace más exclusivas, y desde las que se pueden observar la montaña, en el caso de la Suite Girijaala, o el desierto de Utah, desde la Suite Amangiri. Estas zonas están diseñadas de forma austera, de tal forma que la piscina se funde con el suelo y la estructura de la terraza se compone de líneas limpias.
En estas lujosas suites, el dormitorio consta de una cama king-size cuya estructura se conecta a sus pies con un sofá, uniendo así una zona de estar con la zona de descanso. Y para crear más amplitud y luminosidad, la habitación cuenta con una cristalera plegable de madera que, al abrirse completamente, enlaza la estancia con una terraza, en la que los clientes pueden disfrutar de las vistas acompañados de una hoguera facilitada por un pozo de fuego.
El resort cuenta a veinticinco minutos en coche desde el complejo con el Campamento Sarika, otra opción de alojamiento para el cliente que, en este caso, ofrece la posibilidad de hospedarse en un campamento, pero sin minar la comodidad de la que se enorgullece el hotel. En él se puede experimentar la sensación de aventura gracias a la gran lona en tono beige claro que cubre todos los alojamientos y permite su integración en el entorno como ocurre con el resort.
En el campamento se ofrecen dos estancias con habitación doble, una de ellas ofrece una vista más amplia de los alrededores, ambas recomendadas para familias ya que disponen tanto de una cama king-size en una habitación y en la otra dos camas individuales. También se ofertan tres tipos de habitaciones con vistas a la meseta este, al cañón o al desierto y cuenta con un edificio de zonas comunes con restaurante, piscina y spa.
La decoración nórdica-étnica del campamento se vale de los tonos crema que contrastan con la madera en camel de los canapés y respaldos de las camas, el mobiliario, las puertas y también el marco de las ventanas. En estas habitaciones hacen uso de alfombras gruesas con una combinación de colores cálidos como el rojo tierra, ocre o beige. También se integra el color negro a través de lámparas, mantas o los picaportes de las puertas.
Amangiri no conoce límites, ya que también ofrece a sus huéspedes la posibilidad de alojarse en una casa, la «Mesa Home«. Cuenta con dos plantas y una entreplanta en las que se distribuyen cuatro dormitorios, cocina, salón, piscina y terraza.
Su estructura también está hecha a base de cemento tintado en color arena que contrasta con las paredes revestidas en madera de los balcones de los dormitorios, así como con el marco negro de las cristaleras. Su exquisita decoración interior también está destinada a expandir los espacios, utilizando colores monocromáticos, tanto en el mobiliario como en los textiles, que proporcionan gran iluminación a las estancias. Sin duda, un lugar en el que la tranquilidad y el descanso están asegurados.
Más datos de interés:
Donde: 1 Kanyenta Road, 84741-0285 UT, Estados Unidos.
Contacto: Teléfono +1 435 675 3999, para reservas +1 877 695 3999, dirección de correo amangiri@aman.com.
Precio: De 1.800€ a 5.900€ por noche.
