Este tipo de contenedores utilizan el gas como combustible. Están preparadas para generar una combustión en la que el gas (natural o butano), al quemarse, calienta el agua hasta convertirla en vapor, que será el que salga del depósito y caliente el líquido elemento.

Para acertar con la compra de una caldera de gas se ha de tener en cuenta el tipo de vivienda, las costumbres de sus habitantes y el combustible utilizado, principalmente.

El tipo de vivienda para elegir la caldera de gas adecuada

Son muchos los factores que hay que tener en consideración según el inmueble donde se instala. Habrá que considerar las dimensiones, sobre todo si la caldera de gas se usa para dar calefacción a la vivienda. En este sentido, no es lo mismo que tenga los techos altos, o tenga que cubrir dos, tres o cuatro dormitorios… En términos generales, no es lo mismo calentar un piso que una vivienda unifamiliar. También hay que tener en cuenta el número de cuartos de baño, y si estos poseen bañeras o platos de ducha.

Otro de los factores que influyen es la zona geográfica donde está ubicada la vivienda (norte, sur, montañoso…), y la orientación en la que se construyó, pues entrará más o menos cantidad de sol, y el aislamiento de paredes, techos, suelos y ventanas.

Las costumbres de los habitantes marcarán la decisión del sistema de calefacción

Este es otro factor determinante, ya que no es lo mismo que la casa la habite una sola persona o una familia numerosa, que se duchen todos los días a que sea una vez cada dos o más, que utilicen la bañera en lugar del plato ducha…

El tipo de combustible para las calderas

Existen varios tipos de calderas según el combustible, para elegir con acierto hay que asegurarse de que el suministro está asegurado en la zona donde se localiza la vivienda donde se vaya a instalar la caldera. Además de las calderas de gas, también existen las que funcionan con gasoil o aquellas que son eléctricas. En cuanto a las calderas que utilizan gas, estos son los dos tipos posibles.

Gas natural

Funcionan por medio de un sistema canalizado. Es el más limpio, emitiendo una menor cantidad de gases en comparación con el resto de combustibles. Para su instalación va a necesitar pasar controles y va a requerir una correcta ventilación. Es recomendable realizar una revisión periódica anual, preferiblemente antes de que comience la época invernal.

Gas butano

Se trata de un gas que necesita ser canalizado. Las calderas de gas propano (como también se las conoce), suelen recomendarse para ser usadas en zonas donde no se requiere de demasiada calefacción o para segundas residencias.

Por otro lado, dentro de la categoría de calderas de gas se presentan dos modelos básicos según su función.

Las calderas simples

Estas están capacitadas para suministrar únicamente agua sanitaria caliente.

Las calderas mixtas

Además de ofrecer a las instalaciones agua caliente, también están preparadas para brindar calefacción al hogar.

Según el uso que se le vaya a dar es preferible una de gas con acumulación o de gasoil instantánea si se quiere agua caliente al momento.

Calderas de gas con acumulación

Mantienen siempre agua caliente sanitaria, adecuadas para viviendas con varios cuartos de baño que requieran acceso inmediato al agua caliente.

Por otro lado, es importante señalar otra forma de catalogar las calderas es según su tipología, las cualidades que poseen para la eficiencia y la seguridad.

Calderas de gas atmosféricas

En desuso por usar el aire de la estancia donde se coloca para la combustión. Son peligrosas por la posibilidad de producir intoxicaciones. Está prohibida su instalación desde el 1 de enero de 2010.

Calderas estancas

La combustión, en este caso, tiene lugar en una cámara estanca, por lo que se evita la intoxicación.

Las calderas estancas tienen a su vez dos variedades posibles.

Calderas de condensación

Son de gas natural y pueden llegar a ahorrar hasta un 30 % del combustible, con un rendimiento del 109%. Suelen ser las más caras.

Calderas de gas Bajo NOx

La diferencia fundamental en esta caldera es que tienen un sistema de salidas de humos para que sean más ecológicas y respetuosas con el medio ambiente. Por otro lado, no requieren de tubo de desagüe para la condensación.

¿Cuál es la caldera ideal para tu calefacción?

Si no se tiene claro, después de conocer las posibles calderas de gas para un inmueble, lo más acertado es recurrir a los servicios de Somgas. Estos especialistas en venta e instalación de calderas podrán asesorar y aconsejar sobre cuál es la ideal para cada caso particular. Esta empresa ofrece soporte las 24 horas del día durante todo el año.

En relación al precio, se puede hacer una idea estimada sabiendo que, según las necesidades de cada familia, si la instalación se hace por completo podría oscilar entre 1.600 y 4.500 euros. Si lo único que se requiere es cambiar la caldera, bastará con 1.500 euros. En cualquier caso, como los presupuestos son personalizables, lo mejor es contactar con la mencionada empresa Somgas a través de su página web somgas.es.