Contenidos
La quinta edición del festival de muralismo contextual Parees, promovido por la Fundación Municipal de Cultura y que se ha desarrollado entre el 13 y el 19 de septiembre, ha cerrado un lustro de intervenciones murales contextualizadas con una treintena de obras de gran formato de artistas locales, nacionales e internacionales.
Parees Fest ha conseguido en estos cinco años que vecinas y vecinos, colectivos y especialistas se impliquen en la elaboración conjunta de unos murales que proponen una vivencia de la ciudad que combina arte e historia, trabajando siempre sobre personajes, tradiciones y eventos asturianos. Casi todos los barrios de Oviedo, y localidades como Olloniego, Trubia o Tudela Veguín, lucen paredes que ya no son sólo paredes, sino memoria y personas.
Alba Fabre
La catalana Alba Fabre Sacristán conoció de primera mano la tradición asturiana de las mascaradas de invierno en un encuentro con la asociación Sidros y Comedies El Cencerru, de Valdesoto, un colectivo que además de mantener la tradición, la mejora al incorporar a mujeres en una representación tradicionalmente acotada a los hombres. Los dos Sidros que ahora engalanan la fachada de la confluencia de las calles Joaquín Costa y Ángel Cañedo, en Teatinos, transmiten el entusiasmo y velocidad de sus mascaradas, que los propios integrantes de El Cencerru llevaron hasta el pie del mural una vez acabado, con una representación especial que congregó a muchas personas del vecindario.
Emily Eldridge
La norteamericana Emily Eldridge, después de reunirse con expertos en el Camino de Santiago, ha plasmado su visión del Camino Primitivo, del que Oviedo es origen, en una pared del número 2 de la calle Favila, en La Argañosa. Ha elegido como figura central a una peregrina, reivindicando la presencia de las mujeres en los espacios públicos con una silueta poderosa. La doble condición de reto y sufrimiento del Camino, que además implica un viaje personal para quienes lo realizan, queda representada por la vegetación que rodea a la chica, flores y también zarzas, con estrellas en la parte superior como alegoría de la brújula celeste.
Foni Ardao
Entre las temáticas asturianas de Parees destacan las de contenido literario, como los murales dedicados a Clarín o a Dolores Medio. Este año, el artista asturiano Foni Ardao ha continuado la lista con un mural en el interior de la Biblioteca de La Granja, en el Campo San Francisco, centro especializado en literatura infantil. Arnao ha pintado una obra inspirada en “Montesin”, el primer libro de literatura infantil publicado en asturiano, escrito por María Josefa Canellada. El mural convierte la sala principal de la biblioteca en un escenario, al representar a los protagonistas del cuento con un colorido especial.
Luogo Comune
En esta edición, el italiano Luogo Comune ha realizado un gran mural en el número 40 de la avenida Torrelavega, en La Tenderina, dedicado a Oviedo. La inspiración se la han proporcionado los testimonios ciudadanos, las historias personales de decenas de personas que participaron en la campaña “¿Qué crees que hace especial a la ciudad de Oviedo?”. Las respuestas a esta pregunta, lanzada desde el Festival y desde el Área de Participación Ciudadana del Ayuntamiento, fueron trasladadas al artista, quien ha compuesto una obra que fusiona en su iconografía la historia y la naturaleza, el pasado prerrománico y la cercanía de la montaña y los parajes a los que las y los ovetenses guardan un especial afecto.
Un festival distinto
Parees Fest, además de combinar artistas locales y foráneos, y de centrarse en costumbres y personajes asturianos, desarrolla para cada mural un proceso participativo con la mediación del colectivo Raposu Roxu. El proceso extiende la influencia del mural, al permitir que la ciudadanía viva las obras como propias. No se trata de que un artista plasme su visión, sino que recoja el sentir y la historia del lugar, las expectativas de los vecinos y el legado que significa cada tema que se afronta.
En las fachadas de Oviedo nos encontramos así con recuerdos de la minería, con pandereteras que funden folclore y feminismo, con Tino Casal, con deportes tradicionales o con homenajes a Margarita Salas y a la Fábrica de Loza de San Claudio. Décadas de historia trasladadas a nuestro presente.
La quinta edición ha podido además recuperar algunas actividades paralelas suspendidas el año pasado a causa del Covid-19, cómo el Taller de experimentación de muralismo para familias celebrado en el parque de Invierno y coordinado por Yetooponese. O la novedad que ha supuesto este año “Más allá del mural”, dos recorridos por las obras en marcha en los que el público ha podido conocer los procesos y charlar con las artistas. Las visitas fueron igualmente transmitidas en directo vía redes sociales.
Imágenes: Mira Hacia Atrás y Fer Alcalá.