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En la costa sur este de Vietnam, en Mui Ne se sitúa un destino costero de vacaciones, Oceanique Villas.
Se trata de un proyecto de edificio residencial y su estructura se compone de tres unidades. Dos villas con tres dormitorios y una residencia con cuatro dormitorios. Todas ellas con piscina privada.
A pesar de los desafíos que conlleva un proyecto de estas características, las residencias se construyeron a casi dos metros sobre el nivel del mar, y es algo que precisamente ofrece una óptima privacidad al conjunto desde la playa pública. Además de por supuesto tener la ventaja de tener unas vistas inmejorables de la costa.
En la planta baja de Oceanique Villas, se ubican la cocina, el comedor y la sala de estar, que se orientan hacia la playa, mientras que la parte trasera de la vivienda ha sido diseñada con un patio abierto al cielo, algo que confiere un aspecto muy natural a la residencia, dando luz y ventilación natural. Los dormitorios principales están abiertos a las piscinas infinitas y por extensión a las vistas del mar.
En la parte trasera de las viviendas cada baño tiene un jardín privado con jacuzzi, aportando también luz y ventilación. En la primera planta, todos los dormitorios tienen unas increíbles vistas del océano con sus espectaculares ventanales que van desde el suelo al techo.
La decoración de Oceanique Villas destaca por ser bastante minimalista. Los elementos decorativos empleados son los justos, cuidando la estética y no sobrecargando las estancias de forma innecesaria. El mobiliario es de estilo moderno. Los ventanales de los dormitorios, así como los de toda la vivienda, dan como resultado un espacio diáfano y una gran sensación de pureza y calidez.
Destaca también el uso del color blanco en conjunto con la madera, hecho que confiere al espacio un toque hogareño, que sumado a las plantas en el interior de la vivienda crean un microcosmos de selva.
Del complejo despunta la estructura arquitectónica, que nos maravilla por su exterior de líneas perfectas, y más por la inteligente distribución interior. Construido como es obvio para el disfrute de las vistas, sin desdeñar el buen gusto.
Se trata sin duda de un destino de vacaciones único, donde el lujo y la elegancia se unen de la mano. Para conocer más proyectos que el estudio de arquitectura de las Oceanique Villas ha llevado a cabo, puedes visitar su página.