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Tranquilidad, luminosidad, frescura y naturaleza. Estos son los sustantivos que se nos vienen a la mente cuando nos imaginamos el estilo ibicenco, y es que no hay nada que caracterice mejor a este estilo que su vínculo al verano y al mar.
Aunque el estilo no representa ninguna época del año, no podemos evitar pensar en el verano cuando vemos esas casas totalmente blancas que tanto nos gustan y que caracterizan tanto a la isla de Ibiza. Sería genial tener esta sensación durante todo el año, ¿no crees?
Si quieres descubrir cómo conseguir el estilo ibicenco, tanto en diseño como en decoración, sigue leyendo este artículo para conocer sus características principales.
Características estilo ibicenco
En cuanto al exterior y en la forma arquitectónica del estilo ibicenco, principalmente estas construcciones se caracterizan por sus líneas simples, paredes blancas, formas cúbicas, paredes encaladas, arcos en lugar de puertas, pequeñas ventanas en las fachadas y los techos planos.
Esencia mediterránea
Bien conocemos el estilo mediterráneo, sinónimo de luz y de tranquilidad. Especialmente podemos destacar su parecido con este estilo por la ubicación geográfica, aspecto muy importante que debemos considerar antes de determinar el diseño de interiores para nuestro hogar. Comparte puntos en común con el estilo mediterráneo que se ven en partes de Grecia, por ejemplo.
En este caso las casas están orientadas al sur para aprovechar al máximo las horas de luz que en lugares como Ibiza siempre es esencial disfrutar.
Mucha luz natural
Aprovecha la luz natural durante las horas de sol al máximo, pues de esta manera ampliarás la sensación de espacio. Intenta también colocar alguna que otra planta e integrar los tonos naturales madera en el suelo o en el techo para así dotar de vivacidad y color natural a tu espacio.
Terrazas frescas, el gran must en este estilo
Si hay algo que caracteriza a las casas de estilo ibicenco es la importancia que le da al espacio natural al aire libre. Es tu momento para decorar la terraza, no importa si es pequeña o grande. Para conseguir un ambiente de chill out con un estilo boho incluye algún sillón, pufs o cojines étnicos para sentarse en el suelo, farolillos árabes, telas con estampados preciosos o alguna maceta colgante. ¡Aprovecha el buen tiempo y alegra ese rincón exterior de tu vivienda!
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Hacia el minimalismo
Este estilo es un claro ejemplo de la famosa frase «menos es más». Se caracteriza por buscar siempre aprovechar cada rincón haciéndolo lo más simple y favorable posible, sin abusar de decoración y dando mucho reconocimiento al espacio.
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Blanco siempre, pero con un toque de color
En el estilo ibicenco el color protagonista, sin duda, es el blanco puro casi nuclear, tanto en la fachada como en el diseño interior. Bien sabemos que en general los tonos claros aportan más espacio y luminosidad además de transmitir una sensación de paz y frescor en el aspecto exterior y en el interior de la vivienda. Puedes incluir la misma gama de colores cromáticos en las paredes de todas las habitaciones e iluminar los suelos usando microcemento como material principal. También puedes optar por otros materiales principales como las baldosas de barro y el cemento pulido para revestir los suelos.
Además, no olvides dar alguna pincelada de otros colores, como por ejemplo los tonos azules, sin duda un guiño al color del agua de las playas de Ibiza.
Los colores en las texturas de los objetos y en la decoración como cojines, cestos y cuadros abstractos también marcarán la diferencia.
Complicidad con la naturaleza
En todos los estilos siempre es bueno incluir bases naturales en los muebles (como la madera, la piedra y los troncos), textiles y objetos, pero en el estilo ibicenco esta característica tiene especial importancia. Al igual que ocurre en el estilo mediterráneo, los elementos naturales como la piedra, la madera o el agua marcarán la diferencia en la decoración de las habitaciones, de la misma manera que el uso de textiles naturales como el algodón y el lino en las sábanas, toallas y cortinas será un gran acierto. Las telas vaporosas, frescas y con tacto agradable son ideales para completar un look ibicenco.
Paredes encaladas
Las paredes encaladas originalmente eran un método para protegerse frente a la inflexibilidad del tiempo. Hoy en día se mantienen como símbolo tradicional en el estilo ibicenco.
Estampados étnicos
Como bien hemos mencionado, los toques de color en los textiles, y en este caso con motivos étnicos, geométricos o florales darán ese toque característico que le hace falta para terminar de implementar el diseño ibicenco.
Decoración artesanal y detalles vintage
Los detalles artesanales que incluyan además piezas únicas de carácter más antiguo le dará un toque alternativo y especial en todo el diseño de tu casa. Las bandejas y los jarrones no pueden faltar para decorar algún rincón de la casa.
Imágenes sin leyenda: Depositphotos y Canva
