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Disponer de espacio suficiente en casa es una de las principales demandas de los
particulares a la hora de reformar su casa. Pero cuando los metros no lo permiten
maximizar la sensación de espacio es la única solución posible.
Houzz.es, la plataforma líder en diseño y renovación del hogar que pone en contacto a
profesionales del sector con particulares, ha consultado con su comunidad de profesionales
del hogar cuáles son las claves para ganar amplitud sin necesidad de tirar tabiques.
Colocar muebles en las paredes:
La primera clave para maximizar la sensación de espacio es concentrar todos los muebles en la pared, aprovechando toda la altura que esta ofrece, y no interrumpiendo las vistas del espacio central de la estancia.
Los interioristas en Houzz recomiendan aplicar esta idea especialmente en las habitaciones más pequeñas, en las que se quiere ampliar visualmente el espacio y hacerlo parecer más grande pero es imposible cambiar la distribución de la habitación o hacer cambios estructurales de peso en paredes y ventanas.
Acertar con los acabados:
Junto a la distribución, la elección de los acabados de los muebles contribuye a configurar el espacio y conseguir el objetivo de lograr amplitud. Los diseñadores en Houzz recomiendan apostar por el “todo blanco” ya que hará que un espacio parezca más grande. Cuando aplicamos el blanco a todas las superficies de una estancia, se desdibujan las líneas entre los diferentes planos, expandiendo el volumen.
Paredes, suelos, puertas y armarios en blanco ayudan a reflejar la luz, mientras que los colores oscuros tienden, por el contrario, a absorberla y a reducir visualmente un espacio.
Una alternativa para aquellos que no son fans de “todo blanco” es combinar un tono neutro con otros materiales de colores más oscuros y de acabado natural, como el grafito oscuro o la madera. La mezcla de dos tonos hace que el espacio resulte más interesante. Los colores ayudan a conducir la mirada a través del espacio, haciendo que el ojo se mueva de un lado a otro de la habitación percibiendo distancias y volúmenes.
Aprovechar la luz natural:
Cuando sea posible, abrir una gran cantidad de ventanas dejará pasar toda la luz incluso a las habitaciones más estrechas, lo que mejorará la luminosidad y hará que la estancia esté más conectada con el exterior.
Esta solución también puede ser aplicable al techo, mediante la instalación de claraboyas. Si no dispones de luz natural, apostar por una buena instalación de iluminación artificial también ayudará a ganar sensación de amplitud.
Dependiendo de las características del espacio, los profesionales eligen estratégicamente la posición de los focos para crear juegos de luces y sombras que dan sensación de amplitud y calidez. La iluminación regulable y la combinación de focos principales con lámparas de techo que brindan un suave baño de luz suelen ser apuestas seguras.
Usar espejos:
Los espejos también reflejan la luz, multiplican la intensidad lumínica de cualquier espacio y producen un efecto óptico que hace que se perciba el espacio como mucho mayor de lo que en realidad es.
Además, se recomienda no solo colocar espejos en las paredes, sino también en armarios y puertas y aclaran que el mejor lugar para ubicar un espejo es justo frente de una ventana para que proyecte mejor la luz natural hacia el interior.
Mantener el espacio bien ordenado y despejado:
A través de soluciones eficientes de almacenamiento como cajones debajo de la cama, armarios empotrados, arcones, muebles con cavidades en el interior, podrás mantener la habitación despejada sin dejar a la vista objetos acumulados y ampliar visualmente el espacio, por reducido que sea.