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La fotógrafa argentina Romina Ressia crea increíbles fotografías, en las que mezcla la apariencia pictórca con una temática fresca y actual, que se exponen en las mejores galerías de todo el mundo, desde Milán a Nueva York, París, Zurich o Montreal. Analizamos su biografía y su fascinante obra.
Romina Ressia nació en la ciudad argentina de Azul, en la provincia de Buenos Aires el 11 de marzo de 1981. Ya desde su infancia en esta pequeña ciudad situada cerca de la Capital Federal. Romina había mostrado interés por el arte. Pero, como ocurre con muchos artistas, no tuvo claro desde un primer momento su vocación hacia este sector.
Romina, tras acabar sus estudios secundarios se mudo a la capital, Buenos Aires, donde comenzó sus estudios universitarios como Licenciada en Administración y Contadora pública en la Universidad de Buenos Aires. Se graduó y comenzó a trabajar, pero más tarde decidió abandonar estas profesiones para comenzar una formación y una carrera artística.
Comenzó a realizar estudios artísticos en distintos ámbitos, desde la fotografía, pasando por la dirección de arte o la escenografía en prestigiosas instituciones como el Teatro Colón de Buenos Aires, uno de los grandes referentes artísticos de la capital argentina. Su talento ya desde sus primeros pasos en el mundo de la fotografía era más que visible, y nada más abandono la frialdad de los números por la sensibilidad de una cámara de fotos, su carrera comenzó a dispararse.
En los inicios de su carrera comenzó a dedicarse a una parte más comercial de la fotografía, como es la fotografía de moda, pero con el tiempo su obra fue evolucionando y derivando cada vez más hacia las bellas artes, introduciéndose, además de en la fotografía artística, en las técnicas mixtas.
Con una obra de apariencia pictórica que nos recuerda a la de otros artistas actuales, como la pintura de apariencia renacentista de Hendrik Kerstens o los retratos de celebridades con estilo neoclásico de Steve Paine, el estilo de su fotografía se caracteriza principalmente por el uso de anacronismos y yuxtaposiciones, rompiendo el clasicismo de las pinturas de los grandes maestros flamencos con elementos de la cultura pop actual, como palomitas, pistolas de agua, chicles o hinchables.
Sus delicadas imágenes, con un altísimo nivel de detalle y una fidelidad al estilo renacentista que nos hace dudar si estamos ante una pintura del siglo XVII o una fotografía contemporánea. Utiliza la ironía del contraste entre el pasado y el presente en sus fotografías, para lograr trazar una linea temporal que analiza la evolución humana junto con sus conductas tanto individuales como colectivas.
Romina conserva aún ciertas costumbres adquiridas en su etapa como fotógrafa de moda, que se pueden apreciar en el estilo y los encuadres de sus fotografías. Además, esta artista utiliza la mirada de la mujer para reflejar su particular visión del mundo, ya que sus fotografías son principalmente retratos femeninos.
Entre sus series fotográficas mas destacas encontramos la serie ¿De qué te escondes? en la cual utiliza el camuflaje, como herramienta deshumanizadora del sujeto femenino, fusionándolas a través del uso de coloridas telas estampadas o bordadas, con fondos similares.
Otra de sus series más relevantes es No es sobre la muerte, en la cual elige como sujeto de sus retratos a personas de avanzada edad, ancianos y ancianas, disfrazados con trajes de superhéroes enmarcados en el interior de féretros y ataúdes.
Y una de las series fotográficas que mejor refleja la pieza esencial de la obra de esta fotógrafa argentina, el anacronísmo, es Renaissance Cubism, una serie en la cual se muestran retratos que combinan de una manera casi natural dos estilos tan separados por el tiempo como son la pintura renacentista y el cubismo.
Romina Ressia ha sido premiada en prestigiosos galardones internacionales como el Prix de la Photographie de Paris en el año 2014, el Photo Annual Awards del mismo año, o los International Photography Awards en el año 2015. Además su obra se ha expuesto en el Museo del Louvre de la capital francesa, y forma parte de la colección permanente del Columbus Museum of Art, en Estados Unidos.
Además ha resultado ganadora de la iniciativa The O Project junto a la también fotógrafa Miriam Schaeder, y en el año 2011 se encontró entre las artistas seleccionadas para participar en la Vogue Fashion Night Out de Milán, una de las principales citas mundiales en el universo de la moda.
Podemos ver su obra en las más importantes galerías del mundo o en las ediciones de los principales medios, como Vogue Italia, Vanity Fair, The Huffington Post o The Wild Magazine, pero ¿te imaginas una de sus increíbles fotografías colgada en tu salón? Pues puedes comprar reproducciones a gran escala de gran parte de su obra en este enlace.
