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Cuando los smartphones llegaron para hacer aún más inmediata y fácil la comunicación con el mundo exterior, pensamos que la interacción humana había dado un paso agigantado. Pero estos secuaces de bolsillo escucharon el “toc toc” a la puerta del hogar y asumieron una alianza más audaz. Esta vez, para explorar las áreas de la vivienda, accionando dispositivos que jamás creímos ordenar desde nuestro trabajo, por ejemplo. Así, se abrió el picaporte para adentrarse a una vida más funcional , despreocupada, segura y la guinda del pastel: eficiente. La domótica es solución y futuro.
Aún no tenemos a Robotina en nuestras casas, sino una versión de ella transformada en Alexa, Siri o Google Assistant, encargadas de asumir la automatización inteligente del hogar. Es decir, está en nuestras narices el control de los electrodomésticos y de las instalaciones conectadas por bluetooth o una red wi-fi y vinculadas con nuestro móvil. A esto le llamamos tecnología pura, con mejoras en la calidad de vida.
Hoy, vemos cómo los hogares europeos están en un desarrollo de su propio ecosistema, donde todos los artefactos pertenecen y “confluyen” en un mismo lugar, bajo un acuerdo energético. Esto ha originado que su demanda robe miradas en el parque inmobiliario, motivo por el que los arquitectos y las empresas constructoras están afanados en domotizar sus proyectos. Y ya se calcula que, más de la mitad de las nuevas construcciones han adoptado estas redes integradas a sus conceptos de estancia.
Incluso, las casas prefabricadas en 3D lo acogieron en su impresión, al igual que los nuevos planes de viviendas en cooperativa en España. Pues, de acuerdo al portal especializado en cooperativas de vivienda Lacooop, al menos el 36 % de quienes buscan una vivienda solicitan un hogar inteligente. Este dato genera una matriz de opinión interesante frente a los estudios realizados por distintas asociaciones españolas que estiman que, hasta el 2024, la incursión de la domótica en la vida cotidiana escale el 300 %.
Iluminación eficiente: ventajas brillantes.
Con todos los bombos y platillos, una de las instalaciones de las que puedes tener la máxima autoridad domótica y crear escenas es: la iluminación, con sus distintos niveles y su activación en momentos específicos. Imagina que al abrir la puerta de tu dormitorio este se ilumine, pero al prender el televisor, se apaguen las luces o que, a través de controladores de mando, puedas graduarla y disponerte a leer un libro. Parece una ilusión, pero esto es luminaria inteligente.
Su control puede estar establecido por sensores que emiten una orden al detectar un movimiento o con la luz del sol, para ejemplificar las que se colocan en exteriores. Asimismo, dichos puntos de luz pueden accionarse en circunstancias determinadas como abrir una puerta o, sencillamente, programarlas para un horario de consumo. Son un ahorro de tiempo, de dinero y de memoria (en caso de que olvidemos apagarlas).
Ahora, lo más atrayente de la luz eficiente, en lo que se refiere a la estética y la funcionalidad, es la posibilidad de personalizar las estancias. Con ella puedes recrear ambientes acordes a las necesidades de cada integrante del hogar y de cada estancia, es una particularidad increíble. Su agradable diseño permite un juego colorido de luces, generando un balance entre su brillo y sus usos, adaptándose así al área para la que fue planificada.
En este orden, hay quienes comenzaron por hacer mejoras en la iluminación y cambiaron las viejas bombillas por iluminación LED, admirados por su función ahorradora, que reduce el 80 % de la electricidad requerida por la bombilla común. No hay nada que “objetar al LED”, ante su irremplazable dinamismo, su multifuncionalidad, su larga vida útil y sus principios ecológicos.
De esta manera, esa luz que “nos persigue” hacia donde nos movamos en casa es una proyección de contemporaneidad, ahorro, optimización y confort para toda la familia. Es hora de despedirnos del interruptor clásico y actualizarlo por uno virtual.
La domótica en reformas sostenibles.
La programación y digitalización de las viviendas está en pleno furor, una propuesta de habitabilidad tan acertada que, en la actualidad, es una de las peticiones más frecuentes en las reformas integrales. Y es que el atractivo innovador y las ventajas de la domótica no dejan de sorprendernos.
Es innegable su valor en lo que respecta a la disminución del consumo eléctrico, que puede bajar entre el 25 y el 30 % sólo con agregar una instalación smart, una alternativa que cala a la perfección tras la entrada del nuevo formato de la factura eléctrica, anunciado el pasado 01 de junio. De modo que, transformar la casa en un espacio inteligente no es un diseño exclusivo de confort, más bien es una fórmula sostenible necesaria para reducir el precio de la luz.
En este sentido, la domotización te permite configurar a distancia los artefactos y los sistemas para un uso exclusivo en las horas de menor impacto en el recibo. En cuestión, ya es posible aclimatar la vivienda cuando estamos próximos a llegar, sin tener consumos fantasmas que, lamentablemente, aparezcan en la factura. También puedes activar la seguridad y echarle un vistazo a sus áreas, si estás lejos del hogar.
Planos ecológicos, la guía para viviendas revalorizadas.
Estamos a un Smartphone y a un sistema de redes de cambiar nuestra vida y hacerla mucho más práctica. O sea, estamos a una mínima reformulación de nuestro hogar para aumentar su valor y bajar el consumo energético. Ciertamente, es una cantidad de dinero moderada la que debemos destinar para hacer estos ajustes en nuestro techo, sin embargo, son modificaciones que darán una gran recompensa en un futuro no muy lejano.
De forma muy acertada, la Asociación Española de Domótica e Inmótica reveló que con implementar el ecosistema digitalizado en todo el inmueble, es posible reducir hasta la mitad del recibo de luz y amortizar, al paso de tres años (en promedio), la inversión total del proyecto domótico.
Si bien es cierto, hacer remodelaciones en el hogar nunca dejará de ser necesario, pues las exigencias y gustos cambian conforme a nuestro estilo de vida. Ahora, la idea es hacer que estas rehabilitaciones sean rentables, seguras y, sobre todo, cómodas en un tiempo prolongado. Y, al margen de la lupa funcional y novedosa, llevamos a cabo los planos de las viviendas en Domus Create.
Nuestros borradores hiperrealistas están soportados por la modernidad, sin dejar a un lado la optimización de los espacios, su revalorización y la huella ecológica. Cada línea que hacemos en nuestros planos está planificada en tu calidad de vida, en la estética y en esos pequeños clic de gestión eficiente. Modifica una estancia o todas, reforma tu confort con Domus Create. Embárcate en una obra sostenible.