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Biografía de Sáenz de Oiza
Francisco Javier Sáenz de Oiza, generalmente conocido como Francisco Sáenz de Oiza, una de las grandes figuras de la arquitectura española contemporánea, nació el 12 de octubre de 1918 en Cáseda, Navarra.
Al fallecimiento de su padre en 1936 Vicente Sáenz Vallejo, arquitecto del Catastro en Sevilla, el cual pidió traslado a Madrid para que sus hijos pudieran estudiar en la universidad de la ciudad, quedó al frente de la familia, pues era el mayor de nueve hermanos. En 1946 recibió el Premio Aníbal Álvarez al mejor expediente académico, donde tuvo como referencias a los profesores Torres Balbás, Modesto López Otero y Luis Moya, además de obtener el Premio Nacional de Arquitectura en ese mismo año.
Comenzó junto a Pedro Bidagor su actividad laboral en la Comisaría de Urbanismo para el Plan General de Madrid, donde realizó algunos estudios urbanísticos cercanos a Nuevos Ministerios. Fue premiado por sus primeras obras de vida profesional en concursos como el Premio Nacional de Arquitectura en 1946, con Luis Laorga del Azoguejo de Segovia; o en lugares como la Basílica de la Merced en Madrid y la de Aránzazu en Guipúzcoa; esta última incluyendo la estructura vanguardista de Jorge Oteiza y Eduardo Chillida, lo que le hace convertirse en el templo pionero de la Modernidad en España.
Una vez finalizó los estudios, en 1947 viajó a EEUU gracias a una beca otorgada por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando para ampliar su formación, experiencia que él mismo reconoció como vital en sus estudios y posterior trabajo.
A su regreso a España comenzó a trabajar como profesor en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid, encontrando entre sus primeras construcciones viviendas como los poblados de Fuencarral en 1958, Entrevías, el Concurso de Vivienda Experimental o la Delegación de Hacienda de San Sebastián, la del Poblado de Batán en 1960; construcciones que representan un profundo análisis del hecho arquitectónico desde sus supuestos de uso y de búsqueda de la expresión mínima en sus soluciones formales. En 1968 consiguió alcanzar la Cátedra de Proyectos siendo de 1981 hasta 1983 director de la Escuela.
En Oñate conoció a su mujer Felisa Guerra, con la que tuvo siete hijos, y cuatro de ellos arquitectos, los cuales siempre decían que su padre siempre iba con un metro en el bolsillo y, cuando veía algo que le gustaba, lo medía.
Lo que poco público sabe es que Sáenz de Oiza también era inventor, registrando su primera patente en 1946, un aparato para dibujar, cuya función era mejorar la precisión a la hora de llevar a cabo un dibujo. En 1960 publicó la segunda, la cual ayudaba a mejorar la fabricación de tejas planas.
Aunque en 1985 con 65 años le obligaron a jubilarse de la docencia, Oiza continuó con su trabajo de arquitecto, en el que llevaba trabajando desde la universidad. De joven quiso ser artista, pues como él dijo, se consideraba “Un monstruo, un bicho despreciable, porque las técnicas, la química, la resistencia de los materiales y todas esas zarandajas, lo complican todo y no te dejan espacio en la cabeza, ni tiempo para vivir y disfrutar”
Francisco Javier falleció el 18 de julio de 2000 a sus 81 años en Madrid, por un cáncer de colon que no logró superar.
Obras principales de Sáenz de Oiza
Santuario de Nuestra Señora de Aránzazu (1950-1954)
Es un santuario católico situado en el municipio de Oñate, Guipúzcoa, lugar en el que se venera a la patrona de la provincia, la Virgen de Aránzazu, la cual apareció en 1468.
Esta obra arquitectónica de gran relevancia está formada por hormigón, piedra y acero, y se encuentra en un lugar rodeado de montañas y vegetación. 46 años más tarde de su construcción comenzó a ser servida por la Orden de los Franciscanos.
Su construcción se detuvo varios años, pues Francisco Javier colocó 14 apóstoles en vez de 12, por lo que el Obispado de San Sebastián ordenó la suspensión de la construcción, además de acusarle de hereje.
Edificio Torres Blancas de Madrid (1961-1969)
Edificio ubicado en Avenida de América, en Madrid, formado por 21 plantas —una de ellas, en la parte intermedia del edificio, dedicada a las instalaciones generales; y otras dos de estas con restaurante y piscina— y una altura de 71 metros, encontrando una serie de oficinas en su interior, además de hacer uso residencial en él —algunas viviendas de una planta y otras de doble altura—, pero manteniendo un planteamiento de ciudad jardín vertical.
En la parte superior del edificio se encuentran las terrazas, peculiares por su forma circular como la copa de un árbol. Oiza decía que quería construir un árbol que partiese desde el suelo, logrando que las torres fueran una manifestación de poder para el hombre, de manera que pudiera ponerse de pie, de manera arquitectónica.
Este edificio es un ejemplo de arquitectura organicista —arquitectura que promueve la armonía entre el hábitat humano y el mundo natural— y brutalista —estilo arquitectónico que surgió del Movimiento Moderno—, siendo peculiar en que se aplica un bloque de viviendas de lujo en vez de económicas.
En un inicio se proyectaron dos torres revestidas de mármol blanco, pero finalmente, tan solo se construyó una de hormigón visto. En cada planta se pueden encontrar cuatro viviendas, que alternan las formas circulares y rectangulares.
Torre del Banco de Bilbao (1978-1981)
Esta torre está situada en la Calle Castellana 81, en Madrid, que anteriormente era conocida como Torre BBVA o Torre del Banco de Bilbao.
Este edificio fue la antigua sede y centro financiero de la entidad bancaria BBVA, hasta que en 2015 se trasladó a la Ciudad BBVA, en Las Tablas, Madrid. Además, en 2017 se abrió un expediente para llevar este edificio a la lista de Bienes de Interés Cultural de la Comunidad de Madrid.
Su construcción está realizada sobre el túnel del ferrocarril, donde dos grandes estructuras de hormigón se apoyan a los lados del túnel. La estructura central soporta seis plataformas de hormigón, y una de ellas, soporta cinco pisos de estructura metálica. La planta rectangular incluye dos núcleos de servicios, los cuales contienen las escaleras y ascensores.
La propia fachada, de color ocre —como consecuencia de la oxidación del acero— presenta esquinas redondeadas de acero y cristal continuo para permitir las vistas al exterior desde cualquier parte del edificio.
Otras obras del arquitecto
Además de las obras anteriormente desarrolladas, Sáenz de Oiza creó otras obras; algunas de ellas son, la Plaza del Azoguejo —en Segovia—, edificio de viviendas El Ruedo —M-30 en Madrid—, Poblado de Fuencarral o Batán, construcciones más o menos experimentales para el Instituto Nacional de Vivienda y el Hogar del Empleado. Son edificios sobre todo funcionales, en los que en ciertas ocasiones introducía rasgos de arquitectura orgánica —corriente que pasaba por integrar construcción, mobiliario y entorno de forma armónica— y que pasaría a ser fundamental en España.
A todo ello se le suman edificios administrativos e institucionales de Madrid, como la Triada, el recinto ferial de IFEMA. Fuera de la Comunidad de Madrid también creó grandes obras, y la mayoría muy conocidas y populares en la actualidad, como la Torre Triana, el Palacio de Festivales en Santander y el Campus de la Universidad Pública de Navarra —en Pamplona— entre otros.
Premios al arquitecto
Respecto a los premios, Sáenz de Oiza, recibió grandes y variados:
- Premio Nacional de Arquitectura en su propuesta para la Plaza del Azoguejo —en Segovia—, en 1946
- Premio Nacional de Arquitectura por la Capilla propuesta para el Camino de Santiago, en 1954
- Medalla de Oro otorgada por el Comité de la Excelencia Europea por el edificio construido denominado Torres Blancas, en 1974
- Premio Antonio Camuñas de Arquitectura, en 1989
- Medalla de Oro de la Arquitectura por el Consejo Superior de Arquitectos de España, en 1989
- Premio de Arquitectura y Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid por las viviendas construidas en la M-30, en 1991
- Premio Príncipe de Asturias de las Artes, en 1993
- Medalla de Oro de la Universidad Pública de Navarra, en 2000
Francisco Javier Sáenz de Oiza, arquitecto español, catedrático, y profesor en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid; forma parte de la segunda generación de arquitectos de posguerra.
Imágenes: Wikimedia, Pixabay.
