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La luz es uno de los factores que más influyen en la configuración del mundo tal y como lo podemos observar. En el arte, puede afectar considerablemente en la percepción de diferente obras como esculturas o pinturas, al igual que ocurre con la arquitectura.
Dependiendo de la función del edificio, la luz puede jugar diferentes papeles con respecto a él. En ocasiones sólo se usa para enfatizar su forma exterior, pero también puede influir en la atmósfera que se respira en su interior.
Consideramos que la cuestión del papel de la luz en la arquitectura puede ser tan extenso que podríamos hablar de ello durante muchos artículos. Por eso, distinguiremos una primera parte, en la que nos centraremos en los objetivos del uso de la luz en el interior de los edificios, mientras que en otra ocasión hablaremos sobre la importancia de la luz en el contexto de la planificación urbana.
El papel de la luz en el interior de los edificios
El uso con habilidad de la luz en arquitectura puede cambiar por completo la percepción y el significado de un edificio. El objetivo esencial que se persigue generalmente es el de despertar emociones, logrando crear una atmósfera determinada y creando cierto suspense a los observadores en el interior. Ésta es una estrategia muy conocida que se ha usado durante años, sobre todo en los edificios de carácter cultural y sagrado.
El papel de las luces y las sombras influye directamente en la belleza del interior y ayuda a que éste permanezca en la memoria del visitante.
Creación de emociones y tensión mediante el uso de la luz en el interior de museos
El Museo Guggenheim de Bilbao, uno de los más famosos de los últimos años, es un perfecto ejemplo de cómo la luz puede ser usada para crear una atmósfera determinada dentro de un edificio. Éste, en concreto, es muy reconocido por su fachada, ya que su exterior parece frío y austero debido al uso del acero que se refleja el agua del río en numerosas ocasiones.
Sin embargo, una vez dentro, el visitante experimenta algo muy diferente: gracias a la luz que penetra a través de los numerosos tragaluces y se refleja en las superficies cubiertas de estuco curvadas. El interior, en contraposición a su estética externa, parece cálido y acogedor.
En los edificios que albergan museos la luz también ayuda a evocar emociones y crear tensión, lo que resulta necesario para la percepción adecuada de las obras de arte. El mejor ejemplo de esto se puede ver en el Museo Faaborg en Dinamarca. Hay dos salas colindantes en él: la primera es muy luminosa y la segunda está casi a oscuras. La primera da la impresión de una habitación con luz diurna.
Y si mientras nos encontramos en esta sala iluminada miramos hacia la otra oscura, parece ser un misterioso santuario. Si andamos hacia ella, cuando estamos a punto de entrar, un débil haz de luz despierta emociones intensas en nosotros: vemos una escultura de Mads Rasmussen, fundador del museo, que se encuentra justo debajo de un pequeño tragaluz.
Situada en semi oscuridad, sobre el fondo de una pared color cobalto y frente al observador, la escultura inspira el sentimiento de horror y drama a entre los turistas que lo visitan. Esto ocurre porque solo hay la luz suficiente como para contornear la estatua y los otros elementos de la sala.
Iluminación correcta en museos y edificios culturales
Además de crear la atmósfera adecuada, la luz en edificios culturales también sirven para iluminar las exposiciones. Inicialmente los arquitectos intentaron crear edificios totalmente transparentes; sin embargo, entendieron rápidamente que esta solución no siempre tenía una influencia positiva en la calidad de la iluminación de las obras de arte.
De hecho, el interior puede estar bien iluminado, pero no tenemos ningún control de la dirección ni la intensidad de la luz. Como consecuencia de esto, los arquitectos comenzaron a introducir nuevas soluciones, como paneles corredizos traslúcidos, persianas o cristales de colores. Con el tiempo decidieron reducir la cantidad de luz en el interior para construir un aura misteriosa, lo que favoreció la “comunión con el arte”.
El papel de la luz para la integración de un edificio en su entorno
Habiendo discutido el tema de las impresiones que podría causar un buen uso de la iluminación, ahora nos centraremos en la influencia física de la luz en la arquitectura. Como todo el mundo sabe, cada edificio tiene un entorno muy específico. Al crear sus diseños, los arquitectos siempre han considerado la influencia del nuevo edificio dentro de su vecindario. Algunos de ellos intentan aislar por completo sus edificios de su entorno, mientras que otros intentan lo contrario, crear armonía entre el nuevo edificio y los de su alrededor.
Cómo fusionar los edificios con su entorno mediante la luz
Para conseguir esto último, por ejemplo, lograr que los edificios se fusionen con el paisaje circundante, los arquitectos recurren frecuentemente a la luz. Lo que generalmente desean hacer es crear la impresión de que parte del nuevo edificio es una extensión de los alrededores. Intentan integrar su trabajo con el espacio preexistente. En estos casos es aconsejable permitir que entre gran cantidad de luz al edificio lo que, de forma natural, intensifica sensaciones similares a las que experimentan las personas desde el exterior. También permite una mejor integración entre el edificio y sus alredores y a menudo permite a los visitantes percibir el edificio de una manera más favorable.
El ICHOT ( Centro Interactivo de Historia de Ostrow Tumski), también conocido como Porta Posnania, es un claro ejemplo de este tipo de edificios. Aunque de estilo modernista, el edificio tiene una franja vertical de acristalamiento de arriba a abajo, que ofrece una vista impresionante de las Torres de la Catedral de Poznań y de la “ciudad vieja”. Gracias al influjo de la luz natural, podemos disfrutar de la atmósfera de la antigua Poznań incluso dentro de este moderno edificio.
Para resumir toda esta discusión sobre la luz, sugerimos que te hagas una pregunta muy importante en relación a la iluminación en la arquitectura. ¿Cuál es realmente la mejor iluminación? Mucha gente cree erróneamente que la calidad de la vista de un edificio solo está determinada por la cantidad de la luz que se utiliza para iluminarlo.
Sin embargo, esa idea es incorrecta. Para explicar esto, usaremos el ejemplo de los bajorrelieves ubicados en los edificios desde la Edad Media. Si observamos directamente un relieve y la fuente de luz está detrás de nosotros, éste dará la impresión de ser plano. No podremos distinguir sus convexidades y concavidades, porque las sombras proyectadas por estos elementos serán demasiado escasas y, por lo tanto, invisibles.
Además, será difícil notar la textura del objeto. En este caso, aumentar la intensidad de la luz no mejorará la situación porque no resaltará la plasticidad del relieve. Sin embargo, la situación cambiará radicalmente una vez que cambiemos la ubicación de la fuente de luz. Cuando lo movemos hacia un lado, las sombras proyectadas por los elementos convexos se alargarán y podremos ver las características del relieve con mayor claridad.
Entonces se hará más tridimensional para el espectador. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que mover la fuente de luz demasiado hacia un lado también causará un efecto no deseado. Si la fuente de luz se coloca en una posición tal que la línea entre el espectador y la fuente de luz forme un ángulo recto con la línea entre la fuente de luz y el relieve, una parte del relieve será demasiado oscura para que el espectador pueda verlo.
Este ejemplo ilustra claramente el hecho de que no es la cantidad de luz proporcionada, sino la ubicación de su fuente lo que puede desempeñar un papel clave en la calidad de la visión de la obra de arte. A veces no necesitamos aumentar la intensidad de la luz, sino cambiar la posición de su fuente para poder ver una nueva cara de la arquitectura.
English version:
The role and uses of light in architecture
Light is one of the basic factors influencing the shaping of the world which we can see. It can considerably affect the perception of sculptures and paintings and also of architecture. Depending on the function of the building light may play different roles in it. Sometimes it is only used to emphasize its external shape but it can also influence the atmosphere inside it.
We consider the subject of the role of light in architecture to be so extensive that I would like to divide it into two parts. In the first part, we are going to focus on the purposes of the use of light inside buildings, whereas in the second part we are going to discuss the importance of light in the context of city planning.
The role of light inside buildings
The skilful use of light in architecture can completely change the perception and meaning of the work. The basic purpose for which it is often used is arousing emotions, creating atmosphere and keeping observers inside the building in suspense. It is a well-known strategy which has been used for ages, mainly in cultural and sacred buildings.
The play of light and shadow powerfully influences the attractiveness of the interior and helps it stay longer in the visitors’ memory.
The Guggenheim Museum Bilbao, one of the most famous museums of recent years, is a perfect example of how light can be used to create atmosphere inside a building. Well-known for its appearance, the external form of the museum seems to be cold and austere owing to the use of steel and the numerous reflections in water. Once inside, however, the visitor experiences something quite different: thanks to the light which gets inside through the numerous skylights and is reflected from the curved stucco-covered surfaces, the inside appears to be warm and cosy.
In museum buildings light also helps to evoke emotions and build tension which are necessary for the adequate perception of the pieces of art. The example of this can be seen in the Faaborg Museum in Denmark. There are two neighbouring rooms there: the first one is very bright and the second is bathed in semidarkness. The first room – the well-lit one – gives the impression of everlasting daylight.
If, while in the first room, we look towards the other one, it seems to be a mysterious sanctuary and therefore we are more willing to enter it. Inside, a weak beam of light arouses intense emotions in us: we see a sculpture of Mads Rasmussen, the founder of the museum, which is located directly under a small skylight.
Placed in semidarkness against the background of a cobalt wall and facing the observer, the statue inspires the feeling of horror and drama among the tourists visiting this room. This happens because there is only enough light inside to see the contours of the sculpture and the other items in the room.
Besides creating the right atmosphere, light in cultural buildings also serves the purpose of lighting exhibitions. Initially, architects tried to create fully transparent buildings; however, they quickly understood that this solution does not always have a positive influence on the quality of the illumination of the works of art.
Indeed, the interior might be well-lit but we do not have any control of the direction and intensity of the light. Consequently, architects began to introduce new solutions, such as sliding shaded panels, blinds and colourful glass. In time, they decided to reduce the amount of light in the interior in order to create a mysterious aura, which favoured «communion with art».
Having briefly discussed the subject of impressions which well used light might convey, let us now focus on the physical influence of light on architecture. As everyone knows, every building has its very specific surroundings. Creating their designs, architects have always considered the influence of the new building upon its neighbourhood. Some of them try to completely isolate their buildings from the environment whereas others aim to create harmony between the new building and its surroundings.
To achieve the latter, i.e. to make buildings blend into the landscape, architects frequently use light. What they usually wish to do is create the impression that part of the new building is an extension of its surroundings. They try to integrate their work with the existing space. In such a case, it is advisable to let large amounts of light into the building which, naturally, intensifies the sensations similar to those people experience outside.
It also allows better integration between the building and its surroundings and often enables visitors to perceive the building more favourably. The ICHOT (the Interactive Centre of the History of Ostrow Tumski), also known as Porta Posnania, is a perfect example of such a building. Although modernist in style, the building has a vertical strip of glazing along its entire height, which offers a breath-taking view of the towers of Poznań Cathedral and the «old city». Thanks to the influx of natural light, we can enjoy the atmosphere of old Poznań even inside this modern building.
To sum up the discussion on light, we suggest asking yourself one very important question concerning illumination in architecture: what is the best kind of light? A lot of people mistakenly believe that the quality of the view is only determined by the amount of light, used to illuminate it. However, this idea is incorrect. To explain this we will use the example of bas-reliefs, placed on elevations of buildings since the Middle Ages. If we look straight at a relief and the source of light is behind us, it will seem to be flat. We will not be able to notice its convexities and concavities because the shadows cast by these elements will be too short and thus invisible.
Furthermore, it will be hard to notice the texture of the object. In this case, increasing the intensity of light will not improve the situation because it will not bring out the plasticity of the relief. The situation will, however, change radically once we change the location of the source of light. When we move it to the side, the shadows cast by the convex elements will lengthen and we will be able to see the features of the relief more clearly.
Then it will become more three-dimensional for the viewer. However, it should be noted that moving the source of light too far to the side will also cause an unwelcome effect. If the source of light is placed in such a position that the line between the viewer and the source of light forms a right angle with the line between the source of light and the relief, one part of the relief will be too dark for the viewer to see it.
This example clearly illustrates the fact that it is not the amount of light provided but the location of its source that can play a key role in the quality of the view. Sometimes we do not need to increase the intensity of light but only change the position of its source to be able to see a new face of architecture.
Traducción al español: Laura Alejandro Fuentetaja
Imágenes: Evan Novostro, BondRocketImages, Elena Rostunova, Rudy Mareel, Moolkum, Museo Faaborg.