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Hoy os queremos hablar de los “Ikea Hacks”, una corriente decorativa basada en la customización de muebles de Ikea. En este post os mostramos algunas de las maravillosas ideas para convertir una pieza de mobiliario básica en una cargada de personalidad, y sólo es necesario contar con unos ingredientes muy sencillos: una pizca de imaginación, destreza en el arte de restaurar y las manos como únicas compañeras.
En primer lugar, nos gustaría hablaros de un espacio muy especial que recoge un extenso abanico de ideas e iniciativas en este campo. Se conoce con el nombre de Ikea Hackers y, desde que empezara en mayo de 2006, no ha parado de publicar nuevas modificaciones de los productos de Ikea. Encontramos desde lo más simple, como lacar o pintar un elemento decorativo, hasta cosas más complejas que requieren de apliques, herramientas eléctricas y mucho ingenio. En cualquier caso, se trata de una excelente fuente de inspiración para los amantes del interiorismo y del DIY.
Abrimos boca con un proyecto sencillo donde sólo necesitamos pintura y un buen lacado para obtener un escritorio con una estética tan limpia y cuidada como éste. Se trata de un escritorio de caballete con patas de tres piezas que no requiere grandes esfuerzos si solo deseas pequeñas modificaciones de color. También puedes tomar nota de los artículos decorativos en colores fríos, fundamentalmente blancos y grises, para conseguir un acabado de estilo nórdico de gran belleza.
Todo aquel que quiera iniciarse en el arte de la remodelación, ha de poseer una buena paleta de colores y sino que se lo digan a este archivador alegre y divertido. Un arcoíris que requiere de múltiples cajones individuales que serán pintados y posteriormente pegados entre sí para obtener el resultado de las imágenes. Al pintar únicamente la parte frontal, se proyecta la ilusión óptica de una recopilación de archivadores acumulados uno tras otro.
Saltamos al mundo de las cómodas para llevarnos gratas sorpresas. Tomando como punto de partida la cómoda Rast de Ikea, un mueble de madera sin tratar bastante económico, se hacen verdaderas virguerías poniendo la mente y las manos a trabajar conjuntamente. De cada uno depende la estética que se le quiera dar, bien se puede buscar su rejuvenecimiento o bien su envejecimiento. Aquí, vemos varios ejemplos de piezas vintage con apliques dorados.
Por otro lado, la famosa cómoda Hemnes de Ikea se transforma en un mueble color mint de aspecto vintage. Para un acabado semejante, la lija hace acto de presencia antes y después de las finas capas de pintura. Es esencial lijar posteriormente para sacar el color marrón-grisáceo que tanto juego da para una estética entre rústica y vintage. Lo último, cambiar los tiradores por unos en color bronce.
Otro «Ikea Hacks» muy ingenioso es el de utilizar las puertas correderas Pax como separador de ambientes para conseguir un apartamento basado en el concepto americano de espacio abierto donde haya fluidez y la luz corra por toda la casa. Se olvida uno de construir tabiques o puertas entre las diferentes estancias de la vivienda, aprovechando al máximo toda la superficie disponible.
Para finalizar con esta entrega, dejamos una idea sencilla pero llena de encanto. Solo has de comprar una mesa con cajones de baja altura que tenga las medidas idóneas para encajar entre dos grandes estanterías, perfecto para crear una isleta en el salón. Un espacio íntimo y acogedor donde descansar con un buen libro.
Os dejamos aquí la última colección de Ikea, para que vayáis pensando que proyectos podéis poner en marcha.
